Guía devocional de la Biblia

Día 1

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Lucas 12:13–21

Esta semana continuaremos con nuestro estudio del Evangelio de Lucas.

Vv. 13-15

(1) Cierto hombre acudió a Jesús en busca de ayuda. A la luz del tipo de problema que tenía, ¿qué otras opciones habría tenido además de pedir ayuda a Jesús?

(2) ¿En su lista está la opción sugerida por el apóstol Pablo en I Corintios 6:7?

(3) ¿Por qué este hombre se equivocó al acudir a Jesús como juez o árbitro con respecto a un asunto como este? Quizás consideraba que Jesús era alguien como Salomón, quien tendría la sabiduría necesaria para juzgar entre ellos. ¿Por qué no fue correcto tratar a Jesús como si fuera Salomón?

(4) En el versículo 15, Jesús señaló su error fundamental. ¿Cuál era?

Vv. 16-21 Después de este incidente, el Señor usó una parábola para advertirnos sobre la codicia.

(5) ¿Acaso la producción de una buena cosecha no es una bendición del Señor? ¿Por qué o por qué no?

(6) La cosecha era tan grande que el hombre necesitaba más espacio para almacenarla. ¿Cuáles opciones tenía?

(7) Parece que el plan de construir un granero más grande se refiere a algo más que una simple planificación logística. Según el v.19, ¿cuál era su motivación principal para el proyecto? ¿Por qué estuvo mal? ¿Por qué Jesús lo llamó necio?

(8) Para nosotros, el ahorrar para eventuales emergencias, para la jubilación o para otros propósitos legítimos es parte de la vida. Sin embargo ¿de qué manera podríamos empezar a parecernos a este hombre, así convirtiéndonos en insensatos a los ojos de Jesús?

(9) Reflexione sobre las palabras de Jesús en el verso 21, el cual contiene un veredicto doble con respecto a este hombre.

a. ¿Cuáles son sus dos errores?

b. ¿Es posible que uno almacene cosas para sí mismo y que sea rico para con Dios al mismo tiempo? ¿Por qué o por qué no? (ver 1 Juan 2:15)

(10) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
¿Por qué no ser mejor defraudados?

Hombre! ¿Quién me ha puesto por juez o árbitro sobre vosotros?" (LBLA) (Lucas 12:14)

Es obvio que este hombre respetaba a Jesús lo suficiente como para saber que sería justo y sabía que Sus enseñanzas eran tales que el público en general las respetaba mucho. Por lo tanto, acudió a Jesús en busca de ayuda. Probablemente había sido tratado injustamente por su hermano, quien habría retenido para sí la herencia de sus padres en lugar de repartirla con debía haber hecho. Este hombre aprovechó la rara oportunidad de estar en la presencia de Jesús para pedirle que arbitrara entre él y su hermano. En su mente, la justicia estaba de su lado, y debido a la autoridad de Jesús su hermano tendría que dividir la herencia como debía.

Pero para su mayor sorpresa, Jesús no solo no se involucró en el asunto de su trato injusto, sino que lo acusó de ser codicioso (12:15).

La pregunta es esta: ¿por qué Jesús no intervino? No cuestionó el hecho de que el hombre fue tratado injustamente. ¿Por qué, entonces, también lo acusó de ser codicioso?

Por definición, la codicia es no estar satisfecho con lo que uno tiene y desear tener más. Aunque es cierto que este hombre no estaba satisfecho con lo que tenía, su deseo era tener cosas que por la ley le pertenecían, a saber, su parte de la herencia. Aunque el texto no proporciona más información sobre su caso, la suposición más natural es que a pesar de que no había logrado que se le repartiera su porción, o que se le repartiera la porción completa, parece que tampoco lo habían maltratado. Su problema, según Jesús, era la codicia.

Sin embargo, incluso si hubiera sido maltratado, se estaba acudiendo a la persona equivocada, cómo Jesús le señaló. No fue esa la razón por la que había venido a la tierra; no vino como juez o árbitro de las cosas materiales, puesto que "aun cuando alguien tenga abundancia, su vida no consiste en sus bienes”(Lc. 12:15). El vino para dar la vida eterna.

De vez en cuando, nos encontramos con creyentes en la casa de Dios que llevan casos similares ante la iglesia para que la iglesia sirva de árbitro. Me temo que este mismo principio sigue vigente, y que la iglesia no fue constituida juez o árbitro de cosas materiales; el objetivo principal de la iglesia es predicar el evangelio de la salvación eterna en Cristo. Y a pesar de que algunos de tales casos puedan ser muy válidos, el apóstol Pablo establece un principio muy importante cuando se trata de la noción de que la iglesia pueda servir de árbitro, a saber, “¿Por qué no sufrís mejor la injusticia? ¿Por qué no ser mejor defraudados?" (I Corintios 6:7). Aunque muchos creyentes piensan que estas palabras de Pablo son difíciles de aceptar, estoy seguro de que para el hombre que buscó a Jesús, Sus palabras fueron aún más difíciles de aceptar, ¡puesto que Jesús incluso lo acusó de ser codicioso!

Día 2

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Lucas 12:22–34

Inmediatamente después de la parábola del rico insensato, Jesús usó dos analogías más para recalcar Sus observaciones con respecto a las cosas de esta vida.

(1) Jesús nos pide que no nos preocupemos por la vida, en especial por la comida y la ropa.

a. ¿Qué quiere decir "preocuparse"?

b. ¿Cómo podemos saber que nos estamos "preocupando" por algo?

(2) Jesús no niega que necesitemos comida y ropa; lo que quiere decir es que la vida es más que esas cosas.

a. Puesto que la comida y la ropa realmente son elementos esenciales de la vida, ¿de qué manera la vida puede ser más que ellas?

b. Si nuestra existencia fuera limitada a lo que comemos y vestimos, ¿cuán diferentes seríamos de los animales?

(3) ¿Cómo normalmente consideraría usted la vida de los cuervos y las otras aves?

a. ¿La razón de su existencia es simplemente el principio de la "supervivencia del más apto"?

b. ¿De qué manera las palabras de Jesús desmienten tal noción?

(4) ¿Usted tiene tiene la convicción de que es mucho más valioso que los pájaros? ¿Por qué o por qué no?

(5) De ser así, ¿cómo debe vivir?

(6) De no ser así, ¿qué puede hacer?

(7) ¿Piensa usted que la duración de la vida de uno, incluida la de usted, depende de Dios solamente?

(8) ¿De qué manera los hombres modernos intentan prolongar su vida "preocupándose"?

(9) ¿Esto funciona realmente?

(10) Al parecer, el ejemplo de los lirios parece ir más allá de la necesidad de supervivencia básica, quizás refiriéndose al deseo del lujo.

a. ¿Puede usted recordar algún momento cautivador cuando contempló la belleza de las flores en la naturaleza o en una pintura?

b. ¿Está de acuerdo con lo que dice Jesús en el v. 27? ¿Por qué o por qué no?

c. Por lo tanto, ¿Cuál es el mensaje colectivo de los lirios y la hierba?

(11) ¿Este mensaje del Señor ha hecho algún impacto en usted? ¿Por qué o por qué no?

(12) A la luz de lo anterior, ¿es usted una persona de poca fe?

(13) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
¡Somos príncipes!

No temas, rebaño pequeño, porque vuestro Padre ha decidido daros el reino." (LBLA) (Lucas 12:32)

En esta famosa exhortación, Jesús aborda nuestras preocupaciones sobre las necesidades básicas de la vida con gran comprensión y compasión.

Para empezar, Jesús nunca niega que la comida y la ropa sean necesarias. Lo único que dice es que la vida es más que la comida y el cuerpo es más que la ropa, y que no debemos preocuparnos por estas cosas.

Los oyentes inmediatos de estas palabras de Jesús fueron discípulos galileos, la mayoría de los cuales no eran ricos y entendían lo que es preocuparse por la comida, la bebida y la ropa. Pero también se podían identificar con las analogías que dio Jesús de los cuervos, los lirios y la hierba. Los lectores actuales contemplan la supervivencia de los cuervos a través de la lente del principio de “la supervivencia del más apto”. Sin embargo, lo que Jesús quiso señalar al usar la analogía de los cuervos era la provisión amorosa y el cuidado continuo del Padre que se extiende incluso a los cuervos.

Aunque Jesús reprende correctamente a aquellos de nosotros que nos preocupamos por nuestras necesidades básicas, llamándonos "hombres de poca fe", y nos compara con los paganos al decir que "los pueblos del mundo buscan ansiosamente todas estas cosas", lo que no dice es lo siguiente: "vuestro Padre sabe que no necesitáis estas cosas”. En cambio, dice, "vuestro Padre sabe que necesitáis estas cosas". En efecto, podemos llevarle todas nuestras necesidades.

En mi opinión, Sus últimas palabras a los discípulos en este discurso sobre nuestras necesidades son sumamente reconfortantes, especialmente las siguientes: “No temas, rebaño pequeño” (12:32). Es cierto que somos como ovejas; somos totalmente incapaces de sobrevivir sin Él. Además, somos pequeños en el sentido de que no somos muchos. Pero estas realidades no disminuyen en nada la importancia que tenemos para Él. Y aún más asombrosas son las siguientes palabras que añadió: ¡“porque vuestro Padre ha decidido daros el reino”! En otras palabras, somos mucho más grandes que cualquier príncipe de este mundo, incluidos el príncipe Harry y el príncipe William de Gran Bretaña. ¿Cómo, entonces, podemos vivir como mendigos que se preocupan todos los días cuando la más rica gloria del cielo nos pertenece?

Día 3

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Lucas 12:35–40

Jesús usa muchas parábolas y metáforas de bodas para describir Su segunda venida. En esta, nos compara con unos esclavos que están esperando el regreso de su Amo de Su banquete de bodas. Observe que lo que describe aquí es un banquete continuo donde hay muchos esclavos cuya responsabilidad es servir y enormes lámparas para iluminar el gran salón palaciego.

(1) ¿Cuán importante debería ser este banquete para los esclavos?

(2) ¿En qué consistiría una preparación adecuada?

(3) Explique cómo esta parábola del banquete puede aplicarse a nosotros, con respecto a lo siguiente:

a. Nuestro deber de estar conscientes de quiénes somos y la expectativa de que estemos presentes en este banquete

b. El recordatorio de que debemos estar vestidos apropiadamente para servir

c. Nuestro deber de mantener las lámparas encendidas

(4) ¿Cuál es la recompensa para los esclavos a quienes su Amo encuentra velando y listos cuando venga?

(5) ¿Cuán asombrosa es esta recompensa?

(6) La parábola sugiere que no todos los esclavos estarán listos y velando. ¿Por qué? ¿Esto describe a usted?

(7) ¿Por qué usó Jesús la analogía de un robo en una casa para enfatizar la necesidad de estar listos? ¿De qué manera esta analogía es una fiel descripción de cómo será Su segunda venida?

(8) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
La gloriosa esperanza de Su venida

Estad siempre preparados y mantened las lámparas encendidas,  y sed semejantes a hombres que esperan a su señor ... Dichosos ... en verdad os digo que se ceñirá para servir, y los sentará a la mesa, y acercándose, les servirá. ...." (LBLA) (Lc. 12:35-37)

Muchas de las parábolas y analogías contadas por el Señor no solo eran fácilmente entendidas por Sus contemporáneos, sino que aún hoy nos identificamos con ellas con mucha facilidad. Una de estas es la analogía de ladrones que entran en nuestra casa en el momento que menos los esperamos.

Es cierto que “si el dueño de la casa hubiera sabido a qué hora iba a venir el ladrón, no hubiera permitido que entrara en su casa” (Lc. 12:39). Es por esta razón que muchos de nosotros instalamos sistemas de seguridad y cerrojos adicionales para asegurar las puertas, además de tomar otras medidas de precaución para asegurar nuestra casa. Queremos disuadir a los posibles ladrones y estar preprados para un eventual intento de robo.

Jesús usa esta analogía para enfatizar la necesidad de que estemos listos para Su segunda venida, cuya fecha no conocemos y es totalmente impredecible. Por lo tanto, la pregunta que debemos hacernos es la siguiente: "¿Cómo debemos prepararnos para Su venida?"

Puedo pensar en tres aspectos importantes del deber de estar listos para Su venida:

1. La preparación más básica es asegurarnos de que somos salvos, arrepintiéndonos y recibiendo a Jesucristo como nuestro Señor y Salvador. Sospecho que todos (o al menos la mayoría) de nuestros lectores ya están preparados con respecto a esto. De no ser así, es primordial que usted lo haga, puesto que el momento de Su venida es totalmente inesperado y que lo más probable es que lo que Jesús dice en Lucas 12:20 describe a usted: su vida puede ser reclamada por Dios en cualquier momento.

2. Sin embargo, como creyentes, necesitamos estar vestidos de manera apropiada para Su regreso (12:35). Pablo dice lo siguiente al respecto en Romanos 13:11-14:

Y haced todo esto, conociendo el tiempo, que ya es hora de despertaros del sueño; porque ahora la salvación está más cerca de nosotros que cuando creímos. La noche está muy avanzada, y el día está cerca. Por tanto, desechemos las obras de las tinieblas y vistámonos con las armas de la luz. Andemos decentemente, como de día, no en orgías y borracheras, no en promiscuidad sexual y lujurias, no en pleitos y envidias; antes bien, vestíos del Señor Jesucristo, y no penséis en proveer para las lujurias de la carne .”

Estas son palabras que debemos tomar en serio.

3. Debemos ser como administradores fieles y sabios (12:42) que entienden las tareas y encargos que les ha encomendado su Amo. No debemos enterrar nuestro talento (Mateo 25:25), sino hacer buen uso de ellos sin maltratar a los demás esclavos.

Todo lo anterior es un resumen de lo que nosotros realmente debemos hacer como esclavos de Jesucristo. Sin embargo, a medida que cumplimos fielmente con nuestros deberes, las recompensas son simplemente asombrosas: cuando regrese nuestro Amo, Él se vestirá para servirnos a nosotros (12:37), y aquellos que son siervos fieles y sabios, serán puestos a cargo de “todos sus bienes” (12:44).

¡Qué gloriosa esperanza tenemos en Jesucristo!

Día 4

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Lucas 12:41–48

(1) Pedro hizo una pregunta muy interesante sobre la última parábola (sobre la necesidad de estar listos como esclavos del Amo):

a. ¿Cuáles serían las implicaciones si la parábola estuviera dirigida solo a ellos, Sus discípulos (12:1)?

b. ¿Y si la parábola estuviera dirigida a todos los que escuchaban?

c. En la mente de Pedro ¿cuál diferencia habría entre ambas hipótesis?

(2) Si Pedro pensaba que él no era un simple esclavo, sino el jefe de los esclavos, ¿cuáles serían sus responsabilidades?

(3) En su opinión, ¿cuál es el énfasis de los deberes descritos en el vers. 42?

(4) ¿Cómo puede aplicar esto a su propia vida?

(5) ¿Cuál será la recompensa de un siervo tan fiel? ¿En realidad será su recompensa?

(6) El versículo 45 describe al siervo malvado:

a. ¿Qué ha hecho este siervo?

b. ¿Por qué haría tales cosas, puesto que el Amo le había dado un puesto tan importante en su casa y que debía conocer muy bien a su Amo?

c. ¿Cuál podría ser el mensaje para nosotros hoy?

(7) Jesús da dos posibles explicaciones para la maldad de este mayordomo. La primera es que comete estas maldades intencionalmente y la segunda es que lo hace sin saberlo.

a. ¿Cómo es posible que uno de los sirvientes principales no se dé cuenta del daño que está haciendo a los demás esclavos?

b. ¿Cuál será su castigo?

(8) ¿Cuál es, entonces, la respuesta que da Jesús a la pregunta de Pedro mediante esta parábola?

(9) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
¿Acaso Jesús cambió Su calendario?

Pero si aquel siervo dice en su corazón, 'Mi señor tardará en venir'; y empieza a golpear a los criados y a las criadas, y a comer, a beber y a embriagarse." (LBLA) (Lucas 12:45)

Parece que todos los eruditos de la Biblia opinan que los apóstoles y discípulos de la iglesia primitiva esperaban un inminente regreso del Señor Jesucristo, y que vivían y predicaban a la luz de esta expectativa. La pregunta que parece surgir naturalmente es si los Apóstoles estaban equivocados al tener esta expectativa, o si Jesús cambió Su plan con respecto a la fecha de Su regreso.

Como acabamos de leer en las parábolas de Lucas 12, un motivo que se menciona repetidas veces es no solo el carácter inesperado del momento del regreso de Jesús, sino también la noción de que habrá una espera mucho más larga de lo previsto, puesto que el siervo malvado piensa que su amo “tardará en venir”(12:45). De manera similar, el Evangelio de Mateo nos cuenta la parábola de las diez vírgenes, todas de las cuales se quedaron dormidas “al tardarse el novio” (Mateo 25:5). Estas parábolas dejan en claro el hecho de que la espera sería excepcionalmente larga.

Es cierto que los primeros creyentes deseaban fervientemente el pronto regreso de su Señor, y que algunos, debido a lo que ellos consideraban un retraso, comenzaron a dudar. Fue por esta razón que Pedro tuvo que recordarles de que “El Señor no se tarda en cumplir su promesa, según algunos entienden la tardanza, sino que es paciente para con vosotros, no queriendo que nadie perezca, sino que todos vengan al arrepentimiento” (2 Ped. 3:9). Es interesante notar que Pedro no dijo que Jesús era paciente con los incrédulos que perecerían, sino que es paciente con nosotros. Esto significa que cualquier retraso es causado por nosotros, quienes somos demasiado lentos para cumplir con la Gran Comisión que se nos encargó.

Día 5

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Lucas 12:49–59

12:49-53

(1) Aunque nos gusta pensar en Jesús como el Príncipe de Paz (Isa. 9: 6), Él mismo nos dijo que había venido a traer división. ¿Piensa usted que estos dos conceptos son contradictorios? ¿Por qué o por qué no?

(2) ¿Sobre qué bautismo estaba hablando y por qué se angustiaba hasta que se completara? (Marcos 10:38-39)

(3) La división de la que habló Jesús tiene dos características:
(i) ocurre a causa de Él (es decir, a causa de creer en Él),
(ii) ocurre en especial entre las familias más cercanas:

a. ¿Por qué lo mencionó después de hablar de Su bautismo?

b. ¿Por qué deseaba que ese fuego “ya estuviera encendido”?

c. ¿Usted ha tenido alguna experiencia de división dentro de su familia a causa de Él?

d. ¿Puede recordar divisiones semejantes que ocurrieron dentro de otras familias en la historia reciente?

(4) Desde una perspectiva a más largo plazo, ¿a qué llevaron finalmente estas divisiones?

12:54-56—Jesús se dirige a la multitud

(5) Si los primeros oyentes eran bastante precisos con su pronóstico del tiempo (la lluvia proviene del mar Mediterráneo en el oeste y el calor del desierto en el sur), hoy somos aún más precisos:

a. ¿A cuál tiempo presente se refería Jesús?

b. ¿Acaso es diferente ahora?

c. ¿No deberíamos nosotros también discernir nuestro tiempo? ¿Por qué o por qué no?

12:57-59

(6) ¿Qué tiene que ver esta parábola con nuestro tiempo presente?

(7) ¿Debemos estar esperando el juicio de Dios? ¿Por qué o por qué no?

(8) ¿Qué debería hacer el mundo?

(9) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
Un calor inmortal

Yo he venido a echar fuego sobre la tierra; y ¡cómo quisiera que ya estuviera encendido!" (LBLA) (Lucas 12:49)

Siempre nos gusta retratar a nuestro Señor Jesucristo como un hombre de paz y amor, y con razón. Él es llamado el Príncipe de Paz (Isaías 9: 6), y solo a través de Él podemos hacer las paces con Dios (Efesios 2:14).

Sin embargo, para aquellos que rehúsan creer en Él, Él será un “fuego consumidor” que todo consume (Deut. 4:24, 9: 3); este es el destino del mundo incrédulo. Él también es un fuego consumidor que purifica (1 Cor. 3:15). George Herbert fue un poeta místico de las generaciones pasadas que amaba a Dios. Vale la pena reflexionar sobre sus meditaciones sobre este santo fuego consumidor:

Calor Inmortal, no permitas que tu más grande llama
se acerque tanto a nosotros; esos fuegos
consumirían al mundo, primero has de domarlos,
y prender en nuestros corazones deseos ciertos

que consuman el desenfreno y realicen tu camino.
entonces te jadearán nuestros corazones; entonces
nuestra mente pondrá toda su invención a tu altar,
y allí con himnos enviaremos tu fuego de vuelta:"

http://faustomarcelo.blogspot.com/2015/09/poemas-de-george-herbert.html

Día 6

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Lucas 13:1–9

(1) Además de lo que nos dicen las palabras que Lucas registra aquí, no sabemos nada sobre la muerte de los galileos ejecutados por Pilato o la muerte de aquellos sobre los cuales cayó la torre en Siloé. Sin embargo, al parecer el pueblo pensaba que la forma en que algunas de estas personas murieron estaba relacionada con su pecado. ¿Por qué pensaban así?

(2) Haga una evaluación honesta de sí mismo. ¿Usted tiene pensamientos similares cuando escucha de alguien que tuvo una muerte especialmente horrible?

(3) ¿Acaso el pueblo no tuvo la misma actitud ante la horrible muerte de Jesús en la cruz?

(4) ¿De qué manera Jesús corrige su punto de vista? ¿Qué significa "perecer o perder"? (ver Juan 3:16)

(5) Si la higuera representa a la nación de Israel (una figura común en el Antiguo Testamento), ¿cuál es el mensaje para la multitud?

(6) Sin embargo, esta parábola también puede tener una aplicación para cada individuo.

a. ¿Qué aplicación tiene la parábola para usted y para mí con respecto a la paciencia de Dios?

b. Por lo tanto, ¿cómo debemos orar por nuestros seres queridos y amigos que aún no han recibido a Cristo?

(7) A menudo nos sentimos frustrados e incluso desesperados al enfrentar el mundo actual que sigue rechazando a Dios y desobedeciendo Sus palabras. ¿Qué enseñaría esta parábola sobre la condición actual del mundo?

(8) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
La retribución divina

Os digo que no; al contrario, si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente." (LBLA) (Lucas 13:5)

A menudo leemos que Dios emplea milagros asombrosos para traer Su retribución divina sobre los enemigos de Israel en el Antiguo Testamento. Las diez plagas que cayeron sobre la tierra de Egipto y sus habitantes son ejemplos clásicos de esto. Dios también usaba los desastres naturales para disciplinar al pueblo de Israel de vez en cuando. Un ejemplo típico es la sequía de tres años que ocurrió durante la época de Acab (1 Rey. 17:1).

Por lo tanto, es obvio que para la época de Jesús el pueblo había desarrollado el hábito de relacionar los desastres (entre ellos las muertes horribles) con la retribución divina. El resultado fue que cuando algunos galileos murieron, probablemente al ser ejecutados por Pilato, y su sangre fue mezclada con sus sacrificios, el pueblo automáticamente pensó que estos galileos debían ser "más pecadores" que los demás.

Al comentar sobre este tema, Jesús no quizo decir que los galileos que murieron no eran malvados, sino que no eran necesariamente más malvados que los demás. Su punto tampoco era que estos galileos no eran más malvados que los demás, sino que somos todos malvados y pereceremos si no nos arrepentimos.

De la misma manera, vivimos en una época en que la frecuencia y magnitud con las que ocurren los terremotos y otros desastres naturales no tienen precedentes; sin embargo, no debemos juzgar a los que murieron en estos desastres, como si fueran más malvados que nosotros. Al mismo tiempo, debemos tener presente que estos desastres naturales todavía sirven como recordatorios de que todos hemos pecado, y que a menos que nos arrepintamos, todos también pereceremos eternamente (Jn. 3:16).

Día 7

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Lucas 13:10–17

(1) ¿Debemos culpar a estas personas por intentar observar el día de reposo lo mejor que podían? ¿Qué significaba el sábado para ellos?

(2) En su opinión, ¿por qué no tenían dudas sobre si era lícito desatar sus animales del establo y llevarlos a beber agua?

(3) ¿Por qué consideraban que era lícito hacerlo en el sábado?

(4) ¿Pensaba Jesús que tenían razón al hacer esto con sus animales?

(5) ¿Por qué, entonces, no pensaban lo mismo (especialmente los fariseos) sobre la curación de esta mujer?

(6) Jesús dijo que la difícil situación de la mujer se debía a que estaba atada por Satanás: ¿puede usted imaginar la difícil situación que había vivido esta mujer durante los 18 años anteriores? ¿Qué habría significado para ella esta curación?

(7) ¿Qué dijo el oficial de la sinagoga sobre el incidente? ¿Estaba atacando a Jesús o al pueblo? ¿Cuál fue, entonces, su error?

(8) Explique cómo es su clase de hipocresía.

(9) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
Más allá de la hipocresía

Hay seis días en los cuales se debe trabajar; venid, pues, en esos días y sed sanados, y no en el día de reposo." (LBLA) (Lucas 13:14)

Sabemos que Jesús siempre sana en el sábado. No solo es porque Él es el Señor del sábado (Lc. 6:5), sino también porque no es una violación del sábado sanar y salvar la vida de uno (Lc. 6:9).

Pero este oficial de la sinagoga fue más que hipócrita cuando se opuso a Jesús. Estaba fingiendo que en verdad valoraba a las personas y que simpatizaba con la difícil situación de los enfermos, mientras les decía que debían elegir otro día para venir y ser sanados. En cierto modo, estaba intentando proteger la “inviolabilidad” del sábado y al mismo tiempo satisfacer las necesidades de las personas.

Sin embargo, la verdad es que, como Jesús señaló, este oficial valoraba la vida de sus propios animales mucho más que la de las personas, incluso a aquellas por las que fingía preocuparse, como esta hija de Abraham que fue sanada de una esclavitud causada por Satanás que le había afligido durante dieciocho años (Lucas 13:16).

¿Cómo sabemos que a este ofical realmente no le importaban las personas? Pues bien, todos sabían que el sábado realmente era el único día en que podían esperar ver y escuchar a Jesús en la sinagoga. Por lo tanto, el oficial de la sinagoga fue más que hipócrita al decir a las personas que vinieran otro día para ser sanadas. ¿Quién estaría allí para sanarlas?

Según la definición del diccionario Webster, un hipócrita es alguien que finge ser piadoso o virtuoso cuando no lo es. ¡Este oficial era peor que los otros fariseos porque incluso fingió que le importaban las pesoas cuando no era cierto!