Guía devocional de la Biblia

Día 1

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
2 Corintios 11:1–10

Esta semana concluiremos nuestro estudio de la  Segunda Epistola a los Corintios en el Nuevo Testamento.

En esta sección, Pablo emprende la defensa más apasionada de su apostolado ante los creyentes corintios usando un lenguaje bastante inesperado.

(1) En el v. 1, Pablo comienza exhortando a los creyentes corintios a soportar su "insensatez". ¿De qué manera Pablo revela su "insensatez" dentro de estos primeros 10 versículos?

(2) Pablo ha había dicho (en 10:12) que no se compararía con los demás. ¿Por qué, entonces, se sentiría obligado a compararse con estos “superapóstoles”?

(3) Según los vv. 1-4, ¿cuán serias son las herejías que están enseñando estos “super-apóstoles”?

(4) Según el v. 4, ¿de qué manera los creyentes corintios han demostrado que quizás fueron engañados como Eva? ¿De qué manera el engaño en el que han caído sería similar al de Eva (en cuanto a los medios o el método empleado por Satanás)?

(5) Pablo dice que el celo que tiene es un "celo ... de Dios". ¿En qué aspectos podría un celo piadoso ser diferente de un celo impíos?

(6) Es obvio que al menos algunos miembros de la congregación de Corinto consideran que Pablo es inferior a los “superapóstoles”. Según el v. 6, ¿cuál es uno de los criterios usados por estos que criticaban a Pablo? ¿Qué dice Pablo en su defensa?

(7) Curiosamente, parece que otro detalle que utilizaban para desacreditar a Pablo tiene que ver con el hecho de que mientras Pablo no recibía ningún pago por parte de los corintios, al parecer los "superapóstoles" recibían remuneraciones generosos.

a. ¿Cómo puede esto ser una señal de la inferioridad de Pablo?

b. ¿Qué dice Pablo en su defensa con respecto a esta acusación?

(8) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
Celo piadoso

Celoso estoy de vosotros con celo de Dios ...” (LBLA) (2 Co. 11:2)

Permítanme compartirles las siguientes reflexiones de Paul Barnett, las cuales me han ayudado mucho para comprender la clase de celo que debemos tener por la iglesia de Cristo:

“Pablo declara lo siguiente desde un principio: 'Celoso estoy de vosotros con un ... celo de Dios'. No se debe confundir este sentimiento con la mezquina posesividad que estropea las relaciones humanas. Sus palabras, las cuales también podrían traducirse 'Estoy celoso de vosotros con el celo de Dios mismo', reflejan un tema importante en la LXX (es decir, la versión griega del Antiguo Testamento). Yahweh, el Dios del pacto de Israel, con base en el celo que tiene por su santo nombre, establece un vínculo entre Él y Su pueblo en una relación que excluye la adoración de otros dioses (LXX Éxodo 20:5; 34:14; Deuteronomio 4:24; 6:15). El tema del "celo" también refleja el cuidado de Dios por su pueblo, según Su pacto (LXX Isa. 9:6; 37:32; 63:15-16). Las tradiciones intertestamentales miraban hacia atrás a individuos como Finees y Elías, quienes tomaron medidas violentas contra la idolatría y la apostasía, como si estuvieran actuado con celo por su Dios. Saulo de Tarso, quien antes de su conversión fue inspirado por su celo por Yahweh para perseguir a la iglesia, era parte de la misma tradición (Gálatas 1:13-14; Filipenses 3:6; Hechos 22:3-4). Sin embargo, el celo del Pablo cristiano es un celo convertido, el cual se ha quedado libre de la violencia que lo caracterizaba en los días antes de su conversión, y que también caracterizó las vidas de otros que fueron fanáticos antes de él, un celo ahora impulsado por el amor ... ”

Día 2

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
2 Corintios 11:11–21

(1) Al insistir en que evita a propósito tomar dinero de los corintios, Pablo da dos razones por su decisión. Según los vv. 11-12, ¿cuáles son estas dos razones? ¿Qué es lo que realmente significa la segunda razón?

(2) En los vv. 13-15, Pablo lanza su ataque más feroz de estos “superapóstoles":

a. ¿De qué los acusa?

b. Según Pablo, ¿quiénes son estos “superapóstoles”?

c. ¿Su acusación es demasiado dura? ¿Por qué o por qué no?

(3) Pablo reconoce que su jactancia es “según la carne” (v. 18). ¿Por qué, entonces, continuaría jactándose? ¿Acaso esto no lo convierte en un verdadero “insensato”? ¿Por qué o por qué no?

(4) Al tolerar a estos “superapóstoles” con tanta facilidad (v. 4), ¿qué es lo que los creyentes de Corinto realmente han permitido que se les hiciera, según el v. 20?

(5) A juzgar por las palabras que Pablo ha dicho hasta ahora, ¿piensa usted que al tolerar con tanta facilidad a estos “superapóstoles” (v.4) los corintios ya se han descarriado o solo están en peligro de hacerlo? ¿Por qué?

(6) Por lo tanto, ¿qué es lo que Pablo quiere lograr mediante su jactancia?

(7) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
Tratar con falsos apóstoles y falsos profetas

Porque los tales son falsos apóstoles, obreros fraudulentos, que se disfrazan como apóstoles de Cristo." (LBLA) (2 Co. 11:13)

Aunque algunos comentaristas piensan que es posible que los "superapóstoles" a quienes Pablo ataca en esta sección sean algunos de los apóstoles respetados de Jerusalén, el versículo anterior nos muestra claramente que no se trata de apóstoles en absoluto, puesto que predican a "otro Jesús" y a "un espíritu diferente”, y por lo tanto, "un evangelio distinto” (11:4). Ahora Pablo los llama no sólo “falsos apóstoles", sino "obreros fraudulentos” e incluso “servidores” de Satanás (11:15). No es de extrañar que Pablo no les diera la oportunidad de influir y esclavizar a los corintios. Es obvio que apesar de que Pablo tuvo desacuerdos con Pedro y Santiago (Gálatas 2:9-14) y eligió confrontarlos, todavía tenía una buena relación con ellos como hermanos en el Señor (2 Pedro 3:15). En cambio, Pablo no deseaba tener ninguna clase de compañerismo con estos falsos apóstoles.

Esta misma actitud hacia los herejes ha sido la marca de la verdadera iglesia. Aunque es cierto que ha habido momentos en la historia de la iglesia en que la iglesia recurrió al uso de la violencia en nombre de la ortodoxia, ese no fue el ejemplo de Pablo. Como contemplamos en el artículo de ayer, "el celo del Pablo cristiano es un celo convertido, el cual se ha quedado libre de la violencia que caracterizaba los días antes de su conversión, y que también caracterizó las vidas de otros que fueron fanáticos antes de él, un celo ahora impulsado por el amor ... ” Sin embargo, Pablo permanece alerta en su defensa del evangelio puro y su desvinculación de los herejes.

Lamentablemente, muchos evangélicos en nombre del amor han perdido el celo que tenía Pablo por preservar la verdad del evangelio, y nada es más preocupante que el llamado diálogo con los mormones. Puesto que niegan la deidad de Jesús y defienden la noción de la salvación por las obras, la doctrina de que el Dios Padre una vez fue hombre y muchas otras herejías, lo que predican es un Jesús diferente, un Espíritu diferente y un evangelio diferente. Cuando somos tan amorosos que los tratamos como “hermanos” en Cristo, ¿realmente estamos siguiendo el ejemplo de Pablo? Es correcto no recurrir a la violencia contra los herejes; sin embargo, “¿Qué tienen en común la justicia y la maldad? ¿O qué comunión puede tener la luz con la oscuridad? ¿Qué armonía tiene Cristo con el diablo? ¿Qué tiene en común un creyente con un incrédulo? ¿En qué concuerdan el templo de Dios y los ídolos?" (2 Co. 6:14-16). Estas palabras son las de Pablo, no las mías.

Día 3

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
2 Corintios 11:22–33

(1) Al compararse a sí mismo con los “superapóstoles” en el v. 22, ¿cuáles criterios usa Pablo? ¿Qué nos dice esto acerca de la posible identidad de los “superapóstoles”?

(2) Pero en los vv. 23-29, Pablo enumera sus propios credenciales, las cuales casi nadie, especialmente los “superapóstoles”, podría igualar. Intente agrupar estas credenciales en subdivisiones lógicas.

(3) Las siguientes son las subdivisiones que yo sugiero, con base en el énfasis que Pablo usa en cada una (la cual se puede reconocer más fácilmente en el griego original que en la traducción):

a. La sección de los "más": en muchos más trabajos, en muchas más cárceles, en azotes un sinnúmero de veces

b. La sección de las “muchas veces”: estaba a menudo en peligros de muerte, cinco veces azotado, tres veces golpeado con varas, una vez apedreado, tres naufragios, una noche y un día en el mar abierto, frecuencia en viajes

c. La sección de los “peligros”: de ríos, de (en manos de) salteadores, de sus compatriotas, de los gentiles, en la ciudad, en el desierto, en el mar y entre falsos hermanos

d. La sección de las "condiciones": se encontraba en trabajos y fatigas, en noches de desvelo, en hambre y sed, a menudo sin comida y en frío y desnudez

e. La sección del “además”: estaba sobre él la presión cotidiana de la preocupación por todas las iglesias.

(4) ¿Por qué se jactaría Pablo de lo anterior?

(5) En su opinión, ¿cuáles diferencias había entre la jactancia de Pablo y la de los “superapóstoles”?

(6) ¿Por qué dice Pablo que lo que está haciendo es gloriarse “en cuanto a mi debilidad” (v. 30)?

(7) ¿Es usted consciente de las cosas de las cuales tiende a gloriarse (incluso sin saberlo)?

(8) Note la última subdivisión, es decir, la del "además", en el v. 28. El versículo que sigue (29) es probablemente la explicación de Pablo de la razón por la que siente la presión cotidiana de la preocupación por todas las iglesias. ¿Qué nos enseña esto sobre sus credenciales como “apóstol de Jesucristo” (1:1)? ¿Qué ejemplo nos da a usted y a mí?

(9) ¿Por qué Pablo, después de concluir su lista de sufrimientos, agrega un ejemplo más en los vv. 32-33?

(10) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
La carga del ministerio de amor

“¿Quién es débil sin que yo sea débil? ¿A quién se le hace pecar sin que yo no me preocupe intensamente?" (LBLA) (2 Co. 11:29)

Mientras que en la superficie Pablo se está gloriando "según la carne" como los “superapóstoles” (11:18), en realidad su enfoque es muy distinto del enfoque del mundo. Aunque es cierto que Pablo afirma en este capítulo que él también es hebreo, israelita, descendiente de Abraham y siervo de Cristo (11:22-23), esta clase de comparación que se basa en la carne llega solo hasta aquí. El resto de la lista enumera sus sufrimientos por Cristo. En otras palabras, Pablo está levantando su manto y mostrando al mundo las cicatrices que le han dejado su sufrimiento por Cristo. Pero incluso aquí, Pablo en realidad no se está gloriando de estos sufrimientos; cómo podría hacerlo, puesto que comprende que lo que ha sufrido solo sirve para “llenar” en su carne lo que aún le falta con respecto a (su porción de) las aflicciones de Cristo (Col. 1:24). De hecho, lo que dice aquí es que se gloría las cosas que revelan su debilidad (11:30). En realidad, Pablo no es ningún “superapóstol”, y sabe que él, como cualquier otra persona, solo puede perseverar en el sufrimiento mediante Cristo. Es demasiado débil para perseverar por sí mismo. Por lo tanto, la lista de sufrimientos no es más que una lista de sus tiempos de debilidad (lo cual afirma nuevamente en 12:10).

Pero la lista termina con algo que realmente lo diferencia de todos estos supuestos apóstoles que buscan esclavizar a los corintios, obtener ganancias y gloriarse en sí mismos, a saber, su corazón para las personas a quienes sirve, incluso para los corintios infieles, "¿Quién es débil sin que yo sea débil? ¿A quién se le hace pecar sin que yo no me preocupe intensamente?" (11:29).

A pesar de que las amonestaciones de Pablo a los corintios están llenas de duras palabras de reprensión, e incluso de condenación, cada palabra de amonestación viene precedida por una sensación de su debilidad, junto con un dolor interior por su pecado. Así es como funciona un ministerio "encarnacional", un ministerio que tiene una carga de amor.

Día 4

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
2 Corintios 12:1–10

Después de haberles compartido sus inmensos sufrimientos por el Señor, los cuales deberían haber avergonzado a aquellos que desafíaban su apostolado en Cristo, ¿por qué Pablo consideró necesario compartirles algo más, quizás algo que nunca había compartido con nadie hasta ese momento, a saber, sus “revelaciones extraordinariamente grandes”? (v. 7).

(1) ¿Qué impacto habría tenido esto en los corintios, quienes al parecer se enorgullecían de tener conocimiento especial y dones espirituales?

(2) Puesto que Pablo usó la tercera persona para hablar de esta experiencia, la fechó para probar que era real:

a. ¿Hasta dónde fue arrebatado (v. 2 y v. 4)?

b. ¿Por qué no sabía si estaba en el cuerpo o fuera del cuerpo? ¿Qué le enseña esto sobre las visiones y revelaciones sobrenaturales?

c. ¿Qué fue lo que escuchó?

d. En su opinión, ¿cuál fue el propósito de esta experiencia tan sobrenatural?

(3) ¿Piensa usted que después de haber compartido esta experiencia, aunque de mala gana y en la tercera persona, Pablo ha hecho que los demás sopongan “que soy más de lo que aparento" (NVI) (v. 6)?

(4) ¿Qué hace Dios para evitar que Pablo se vuelva presumido? ¿Por qué?

(5) Aunque Pablo decidió no revelarnos de qué se trataba esa espina en su carne, menciona algunos detalles al respecto.

a. ¿Cómo se sentiría usted si tuviera una espina en la carne?

b. ¿Cómo se sentiría si Dios no quitara la espina, sino que la dejara en su carne?

c. A continuación, Pablo llama a este aguijón un mensajero de Satanás; si lo interpretamos de manera literal, ¿cómo actuaría este mensajero como un aguijón en la carne de Pablo?

d. Por supuesto, Pablo suplicó a Dios que se la quitara. Sin embargo, ¿por qué parece detenerse después de suplicar tres veces? ¿Cuál fue la respuesta de Dios?

e. ¿Qué significó la respuesta de Dios para Pablo, de modo que aceptara su condición?

f. ¿La respuesta de Dios se aplica a usted y a su condición? ¿Por qué?

(6) ¿Puede usted también decir la siguiente frase con Pablo: “Por eso me complazco en las debilidades, en insultos, en privaciones, en persecuciones y en angustias ...”? ¿Por qué o por qué no?

(7) ¿La reflexión de hoy le ha ayudado a comprender lo que Pablo dice en el v. 5: “pero en cuanto a mí mismo, no me gloriaré sino en mis debilidades”?

(8) ¿De qué debilidades puede usted gloriarse hoy?

(9) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
Las revelaciones extraordinariamente grandes de Pablo

mas me abstengo de hacerlo para que nadie piense de mí más de lo que ve en mí, u oye de mí. Y dada la extraordinaria grandeza de las revelaciones...” (LBLA) (2 Co. 12:6-7)

Aunque entendemos que fueron los corintios quienes realmente llevaron a Pablo a gloriarse de sus “sublimes revelaciones”, todavía nos preguntamos si Pablo tuvo razón al hacerlo. Permítanme compartirles las reflexiones al respecto de Juan Crisóstomo, un arzobispo de Constantinopla que vivió en el cuarto siglo:

“Sin duda esta revelación fue grandiosa. Pero este no fue la única: había muchas más, pero Pablo menciona solo una entre muchas. Con respecto a que fueron muchas, escuchad lo que dice: 'Para evitar que me volviera presumido por estas sublimes revelaciones'.

"Sin embargo, quizás uno diga lo siguiente, 'si realmente quisiera ocultarlas, no debería haber dado ninguna pista, no debería haber dicho nada por el estilo; en cambio, si realmente quisiera hablar de ellas, debería haberlo hecho abiertamente'. ¿Por qué, entonces, no habló abiertamente ni guardó silencio? Lo hizo para demostrar que recurría a ello de mala gana. Y por eso también ha dicho el tiempo, 'catorce años'. Porque no lo menciona sin tener un propósito, sino para mostrar que el hombre que había guardado el secreto durante tanto tiempo no habría hablado si no hubiera sido grande la necesidad de hacerlo. Y lo habría guardado por más tiempo si no hubiera visto que los hermanos estaban pereciendo.

"Ahora bien, si Pablo desde un principio fue tan digno como para recibir tal revelación, cuando aún no había hecho tan buenas obras; considerad cómo debe haber crecido a lo largo de esos catorce años.

"Y observad cómo incluso en este mismo asunto muestra modestia al decir ciertas cosas pero confesar que de otras es ignorante. El declara que realmente fue arrebatado, pero con respecto a si ocurrió 'en el cuerpo' o 'fuera del cuerpo', dice que no lo sabe. Sin embargo, habría sido suficiente, si hubiera dicho que había sido arrebatado y guardado silencio [sobre el otro asunto]; pero en su modestia agregó esto también. ¿Qué diremos pues? ¿Fue la mente la que fue arrebatada y el alma, mientras que el cuerpo permaneció muerto? ¿O fue arrebatado el cuerpo? Es imposible saberlo. Porque si Pablo, quien fue arrebatado, y a quien sucedieron estas cosas tan indecibles, numerosas y grandiosas, no lo sabía, mucho menos nosotros. De hecho, él sabía que estaba en el Paraíso, y no ignoraba que estaba en el tercer cielo; sin embargo, no sabía claramente en qué condición se encontraba.

"Y considerad también cuán libre está del orgullo. Porque en su narración sobre 'la ciudad de los damascenos' (2 Corintios 11:32) él confirma lo que dice, pero aquí no, puesto que su objetivo no era afirmar este hecho, sino sugerirlo solamente. Por lo tanto, él continúa diciendo, 'De tal hombre podría hacer alarde' (2 Corintios 12:5); esto no quiere decir que haya sido otra persona que fue arrebatada, sino que es un intento de usar el lenguaje (en lo posible) de tal manera que pudiera mencionar lo sucedido mientras evitaba hablar de sí mismo abiertamente. Porque, ¿cuál sería el propósito de hablar de otra persona, cuando estaba hablando sobre sí mismo? ¿Por qué, entonces, lo expresó así? No es lo mismo decir, '(fui) arrebatado' y 'conozco a un hombre ... el tal fue arrebatado'; no es lo mismo decir 'en cuanto a mí mismo, no me gloriaré' y 'de tal hombre sí me gloriaré'. Ahora bien, si alguien dijera, '¿Y cómo es posible ser arrebatado sin el cuerpo?', le preguntaré, '¿Cómo es posible ser arrebatado en el cuerpo?'. Este es aún más inexplicable que el primero, cuando uno intenta examinarlo mediante el razonamiento y no mediante la fe".

Día 5

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
2 Corintios 12:11–18

(1) Es obvio que a Pablo le desagrada mucho tener que gloriarse de la manera en que acaba de hacerlo; sin embargo, él echa toda la culpa a los corintios. ¿Piensa usted que Pablo tiene razón al culparlos? ¿Por qué o por qué no?

(2) Según Pablo, ¿Cuáles son las señales de un verdadero apóstol? Por lo tanto, ¿por qué sigue diciendo que él no es nada?

(3) A juzgar por el versículo 13, ¿puede usted deducir cuál era una de las quejas que los corintios tenían sobre Pablo?

(4) Según el versículo 14, ¿por qué Pablo está tan decidido a no recibir ningún apoyo financiero de los creyentes de Corinto?

(5) Con base en su lectura de los vv. 16-18, deduzca cuáles eran algunas de las acusaciones que habían hecho algunos de los creyentes corintios. Si usted fuera Pablo, ¿habría aceptado recibir apoyo financiero de ellos? ¿Los habría visitado? ¿Por qué o por qué no?

(6) ¿Qué explicación da Pablo en los vv. 14-15 al insistir que los visitaría, aunque no aceptaría su dinero?

(7) Después de haber leído los capítulos 10-12, ¿cómo describiría usted la relación había entre Pablo y la iglesia en Corinto desde la perspectiva de las siguientes personas?

a. Los creyentes corintios

b. Pablo

c. Los compañeros de Pablo (por ejemplo, Tito)

(8) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
En los pasos de Cristo

no busco lo que es vuestro, sino a vosotros...” (LBLA) (2 Co. 12:14)

Cuanto más leo esta “Segunda” epístola de Pablo a los Corintios, más puedo ver la imagen de Cristo en Pablo:

(1) En primer lugar, Pablo sin duda está siguiendo los pasos del sufrimiento de Cristo (1 P. 2:21). Como ya consideramos en una reflexión anterior, la razón por la que menciona repetidas veces su sufrimiento no es tanto porque desea gloriarse, sino que busca identificarse con Cristo en Su sufrimiento.

(2) Así como Cristo dio Su vida por las ovejas, Pablo también está dispuesto a dar su vida por los corintios, y haría cualquier cosa para que obtuvieran un verdadero beneficio. Y lo hace como Jesús, por amor solamente.

(3) Además, así como Cristo, Pablo ha sido rechazado por las mismas personas que ama, pero eso no disminuye su amor por ellos ni un poco. Mientras Pablo se esfuerza por recuperar su amor, casi puedo escuchar el mismo grito paternal que Dios pronuncia en Isaías 1:2,  “Oíd, cielos, y escucha, tierra, porque el Señor habla: Hijos crié y los hice crecer, mas ellos se han rebelado contra mí". Aunque Pablo no invoca al cielo y la tierra para que sean sus testigos (algo que podría haber hecho), de todos modos, él invoca su corazón paternal en su deseo de reconquistar a sus hijos espirituales, los creyentes corintios.

(4) Como hace poco consideramos, Pablo ha seguido el ejemplo del ministerio encarnacional de Cristo, puesto que se identifica con la debilidad del pueblo, incluso antes de reprenderlo (11:29).

Día 6

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
2 Corintios 12:19–13:4

(1) Pablo siente que quizás los creyentes corintios no reciban de buen grado sus palabras y lo acusarán de estar a la defensiva. Por lo tanto, él desnuda su alma y en el v. 19 enfatiza una vez más el motivo y la actitud de su defensa. ¿Qué deberían significar para los corintios estos dos énfasis?

(2) Pablo también explica tres aspectos distintos de su temor.

a. ¿Estaría usted de acuerdo conmigo en llamar el primero un temor a la confrontación (v. 20a)? ¿Por qué?

b. ¿Cuál es su segundo temor (v. 20b)? En su opinión, ¿qué tipo de iglesia es la iglesia de Corinto?

c. ¿Estaría usted de acuerdo conmigo en llamar su tercer temor un temor de la tristeza, (v. 21)? ¿Por qué?

(3) Ahora, Pablo señala lo que está a punto de hacer en su tercera visita; en parte, su proposito es hacer frente a la demanda de la iglesia de una prueba de que Cristo está hablando por medio de él:

a. ¿Cuál es, entonces, la esencia de este reto?

b. ¿Qué evidencia pueden presentar para sostener su desafío?

c. ¿Qué evidencia necesita Pablo para contrarrestar su reto?

d. ¿Qué tiene que ver su cita de Deuteronomio 19:15 en el v. 1 con este reto?

(4) ¿Qué advertencia les da Pablo en el verso 4? ¿Qué quiere decir con ello?

(5) Si usted fuera el apóstol Pablo, estaría contento al pensar en esta tercera visita?

(6) ¿Por qué, entonces, Pablo se siente obligado a visitarlos una tercera vez?

(7) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
¡Qué Iglesia, qué apóstol!

"¿Todo este tiempo habéis estado pensando que nos defendíamos ante vosotros?" (LBLA) (2 Co. 12:19)

Cuando finalmente llegamos a la última parte de 2 Corintios, creo que ante la defensa de Pablo de su apostolado estaremos confundidos, conmovidos, o ambas cosas. Él ha sido impulsado por estos ingratos y rebeldes creyentes corintios a defenderse como un “insensato”; lo obligaron a enumerar todos sus sufrimientos, recordarles su labor incansable por ellos y por el Señor y también mencionar los milagros que había realizado como evidencia de su autoridad para hablar en nombre de Cristo como un verdadero apóstol. Y realmente creo que Pablo estuvo muy reacio a hacerlo y no lo habría hecho si no fuera por el bien del evangelio y la edificación de estos creyentes corintios. Mientras reflexiono sobre cómo Pablo desnuda su alma ante los corintios, me siento agradecido por esta carta que Pablo escribió, por las siguientes razones:

(1) El dicho, “donde hay gente, hay problemas” no es solo un cliché, sino la pura verdad. El final del capítulo 12 y el comienzo del capítulo 13 señala el inicio de las advertencias finales de Pablo contra ellos, y estas advertencias muestran claramente qué tipo de iglesia había en Corinto: una iglesia que está llena de “pleitos, celos, enojos, rivalidades, difamaciones, chismes, arrogancia, desórdenes”(12:20). Como pastor, me encuentro haciendo la siguiente pregunta retórica: "¿Quién desearía ser pastor de una iglesia así?" ¡Qué iglesia!

(2) Eso también me impulsa a hacer la siguiente pregunta: “¿Por qué Pablo todavía querría visitar de nuevo una iglesia así, una iglesia que lo menosprecia por no ser muy elocuente, que se ríe de él debido a su apariencia no muy atractiva, que cuestiona su autoridad e incluso desdeña su amor por ellos? Sin embargo, Pablo muestra repetidas vezes el corazón de su padre, un corazón similar al de Jesús. Él está comprometido con ellos con el fin de edificarlos, de conquistar su amor y de amarlos sin importar el costo. ¡Qué apóstol!

Día 7

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
2 Corintios 13:5–14

(1) ¿Cuál es la prueba básica que Pablo dice a los corintios que deben a hacer?

(2) ¿Qué conlleva tal solicitud, puesto que la última parte del v. 5 puede traducirse “a menos de que en verdad no seáis falsificaciones”?

(3) A la luz de esto, ¿cómo puede uno estar seguro de que tiene a Cristo en él (o en ella)?

(4) Según señalan los versículos 7 y 8, ¿cuál es la base de tal prueba?

(5) A pesar de que Pablo ha sido tan humillado por los corintios, su corazón de siervo se revela completamente en el versículo 9. ¿Qué puede usted aprender del corazón de su siervo en este versículo?

(6) ¿Piensa usted que Pablo realmente usará su autoridad apostólica cuando vaya a Corinto? ¿Por qué o por qué no?

(7) Observe los saludos finales en los vv. 11-12:

a. ¿Qué implica esto?

b. Puesto que estas son en esencia sus últimas palabras, ¿cuán especiales e importantes son?

(8) Al llegar al final de esta carta, separe un tiempo para leer su diario y ver cuáles podrían ser los mensajes más importantes de esta carta.

(9) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
¿Tiene usted a Cristo en ti?

Poneos a prueba para ver si estáis en la fe; examinaos a vosotros mismos. ¿O no os reconocéis a vosotros mismos de que Jesucristo está en vosotros, a menos de que en verdad no paséis la prueba.” (LBLA) (2 Co. 13:5)

Pare mí es muy impactante que Pablo haya terminado esta carta en la cual se dirige a “la iglesia de Dios que está en Corinto, con todos los santos que están en toda Acaya” (2 Corinthios 1:1) pidiéndoles que se examinen para ver si realmente están en la fe, incluso si lo interpretamos como una pregunta retórica.

Sin embargo, a la luz de lo que Jesús dice en Mateo 7:21-23, esta no es necesariamente una mera pregunta retórica, sino una que enseña a todos nosotros que debemos examinarnos, puesto que Él dice,

No todo el que me dice, 'Señor, Señor', entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos. Muchos me dirán en aquel día, 'Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? '. Y entonces les declararé, 'Jamás os conocí; apartaos de mí, los que practicáis la iniquida'.”

Por supuesto, nuestra confianza en tener a Cristo viviendo en nosotros se basa en la misma Palabra de Dios, en el sentido de que mediante el arrepentimiento y la fe en Jesucristo sabemos que Cristo vive en nosotros (Jn. 1:12, Apoc. 3:20, Hechos 2:38). Los reformadores también mencionan que el "testimonio interior" del Espíritu Santo que nos convence y nos guía a Su verdad es una señal importante de la presencia de Cristo en nuestras vidas. Y aquellos que tenemos a Cristo en nosotros también podemos señalar el gozo y las muchas experiencias espirituales y encuentros en Cristo como prueba de ello. Pero todo esto es muy personal (esto no quiere decir que no sea cierto), y si tenemos a Cristo en nosotros, sin duda habrá también un testimonio de la comunidad de fe en la que vivimos. Eso significa que es necesario que nuestra transformación interna sea visible para nuestra comunidad mediante nuestras acciones externas. Esta es nuestra obediencia constante a la voluntad del Padre a la que Jesús se refiere, o como Pablo señala aquí, no hagan nada malo. Con eso, Pablo se refiere a su arrepentimiento continuo (12:21), su renuncia de su forma de vida anterior (12:20) y su rechazo de los “super-apóstoles” y sus enseñanzas.

Nuestro cristianismo "occidental" se ha vuelto tan individualista que olvidamos que a lo largo de las Escrituras, el "amén" de la comunidad de creyentes es muy importante, no solo cuando se trata de nuestro llamamiento o vocación, sino también cuando se trata de la autenticidad de nuestra fe, es decir, si somos creyentes en Cristo o "falsificaciones" (así traducirían algunos "fracasen en la prueba" en 13:5).