Guía devocional de la Biblia

Día 1

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Génesis 41:1–24

Esta semana continuaremos con nuestro estudio del libro de Génesis.

(1) De alguna manera José reconoció la mano de Dios en su interpretación del sueño del jefe de los coperos de Faraón, pero tuvo que esperar otros dos años “completos” (ver la nota en el v. 1 en la versión LBLA). Además de servir como una prueba de fe, ¿cuáles pudieron haber sido otras razones prácticas para estos dos años completos de espera?

(2) ¿Qué lección podemos aprender de esto?

(3) ¿Cuál fue el primer sueño de Faraón? ¿Cuán absurdo fue?

(4) ¿De qué se trató su otro sueño? ¿Cuán absurdo fue?

(5) Si usted los tuviera que interpretarar, ¿qué respuestas lógicas daría?

(6) Podemos estar bastante seguros de que los sabios y magos egipcios habrían pensado en algún tipo de interpretación. Aunque tal vez hubieran tenido respuestas lógicas, no necesariamente habrían sido divinas. ¿Cuál fue la respuesta inmediata de José al faraón? ¿Por qué tuvo que decir eso? Compare la respuesta de José con la de Daniel en Daniel 2:28. ¿Qué semejanzas hay entre las dos respuestas?

(7) Según las versiones LBLA y NVI, el jefe de los coperos usó la palabra falta para referirse al hecho de haber olvidado a José; sin embargo, la palabra usada en el texto hebreo original (het) significa "pecado" (ver la nota en la versión LBLA). ¿Por qué fue un pecado?

(8) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
Dios nunca
llega tarde

Siempre me gusta decir medio en broma que Dios nunca llega tarde, aunque rara vez llega temprano. ¿Por qué lo digo medio en broma? Bueno, si usted ya experimentó el dolor de la espera, sabe lo difícil que puede ser y lo cuánto desea que Dios le proporcione una salida de inmediato. Por otro lado, en lo profundo del corazón, usted como buen cristiano sabe que el tiempo de Dios siempre es mejor.

Es interesante leer lo que parece ser una énfasis especial por parte de Moisés en el hecho de que José tuvo que esperar otros “dos años completos” (Gén. 41:1). Esta expresión transmite con mucha precisión esa dolorosa sensación de espera. Por un lado, José sabía que el hecho de haber interpretado el sueño del jefe de los coperos del faraón no fue un accidente, sino que provino directamente de Dios. Por fe, también sabía muy bien que sería una oportunidad para su reivindicación. Estaba casi seguro de que esta tenía que ser una oportunidad dada por Dios para recuperar su libertad. Sin embargo, no escuchó ni vio nada durante dos años completos. Esto debe haber sido difícil para él.

Todos sabemos que para los que aman a Dios, todas las cosas cooperan para bien (Rom. 8:28) y que Dios conoce el camino que tomamos, y (en palabras de Job), “cuando me haya probado, saldré como el oro" (Job 23:10). Sin duda, para asumir una tarea tan importante y trascendental como el ser primer ministro de Egipto, José necesitaba recibir mucho entrenamiento en la piedad y fe.

Pero también podemos pensar en otras razones prácticas por las que tuvo que esperar otros dos años completos.

Para desempeñar su papel como primer ministro de Egipto, este esclavo hebreo necesitaba mejorar su dominio de la lengua egipcia para poder comunicarse con fluidez y majestuosidad. Estar a cargo del cuidado de los prisioneros importantes del rey (Gn. 39:20) le ofrecería no solo la oportunidad de aprender bien el idioma, sino también unas nociones básicas de las prácticas y la cultura del palacio. Dos años más servirían para prepararlo mejor para su introducción repentina al palacio real.

Y por supuesto, en el plan más amplio de Dios, el momento exacto de la hambruna había sido "determinad[a] por Dios" (41:32), y "Dios lo har[ía] pronto", exactamente de acuerdo con Su propio tiempo.

Por supuesto, nunca es fácil esperar el tiempo de Dios; sin embargo, como David atestiguó por su propia experiencia, “Todas las sendas del Señor son misericordia y verdad” (Sal. 25:10) y Sus "sendas" obviamente incluyen Su tiempo.

Día 2

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Génesis 41:25–45

(1) El deseo de José era simplemente salir de la prisión (40:14), pero lo que obtuvo superó con creces sus sueños más audaces (o quizás no). ¿Cuál podría ser la lección para nosotros en esto?

(2) Al interpretar los sueños del faraón, José resaltó que Dios le había revelado, “lo que va á hacer”.

a. ¿Cuán importante fue esta declaración para el faraón?

b. ¿Cuán importante fue esta declaración para los magos egipcios?

(3) Según José, ¿por qué Dios le había dado a Faraón el mismo sueño en dos formas?

(4) Se puede dividir el discurso de José en dos partes: la primera contiene la interpretación de los sueños, mientras que la segunda contiene el plan de acción que José recomienda al faraón.

a. ¿Qué conllevaba su propuesta?

b. ¿Cuán importante fue el plan que le recomendó?

c. ¿Cuál aspecto del plan pudo haber sido el más difícil de implementar?

d. ¿Piensa usted que José estaba pensando en sí mismo como candidato para ser designado como el hombre sabio que estaría a cargo del proyecto? ¿Por qué o por qué no?

(5) En esencia, ¿para que responsabilidad el faraón estaba nombrando a José, el esclavo hebreo? ¿Qué riesgo estaba asumiendo el faraón? ¿Por qué, entonces, decidió tomar un paso tan audaz?

(6) Intente imaginar el enorme cambio de estatus que experimentó José, casi en cuestión minutos. ¿Cuál pudo haber sido el cambio más improbable de todos? ¿Cómo se puede explicar un cambio tan improbable?

(7) Tanto José como Daniel recibieron un nombre nativo (y en el caso de José, este nombre probablemente significa “Dios habla y vive”; además, se le dio como esposa a la hija de un sacerdote egipcio). ¿Todo esto tuvo algún impacto en su propia fe en Yahveh? ¿Por qué o por qué no?

(8) Nos gusta decir, "de tal palo tal astilla". ¿Qué piensa usted que pasaría con el matrimonio de José? ¿Hay alguna parte de la Biblia que dice que tomó otras esposas? (Para tener una idea, quizás usted desea leer la última parte del libro de Génesis.)

(9) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
El Dios de la historia humana

La historicidad del relato de José ha generado mucha polémica entre algunos eruditos liberales, puesto que, "En todo el cuerpo literario de Egipto, no hay ningún registro de un esclavo asiático que haya sido elevado a la posición de gran visir". Sin embargo, si los historiadores de la antigüedad en Egipto hubieran decidido registrar el nombre de José como un funcionario tan importante de la corte, su única opción sería registrar también el posterior éxodo del pueblo de Israel. Los dos eventos están tan entrelazados que son inseparables. No se puede registrar uno sin incluir el otro. El hecho de que no encontramos ningún relato histórico de ellos no significa que no sean históricos.

Supongo que es extremadamente improbable que el faraón hubiera elevado a un esclavo hebreo a cualquier posición política importante, y mucho menos el segundo al mando, un hombre a quien todo su pueblo debía someterse (Génesis 41:40). Los egipcios despreciaban a los hebreos tanto que "no podían comer con los hebreos, pues esto es abominación para los egipcios" (LBLA) (Génesis 43:32).

También nos da la sensación de que el faraón, al hacer esto, estaba corriendo el riesgo de crear disensión entre sus funcionarios y posibles divisiones en su reino. Si yo fuera el faraón, incluso si estuviera convencido de la sabiduría y la gran habilidad de José, lo habría hecho servir bajo el mando de un primer ministro egipcio con el fin de evitar cualquier disensión. Si José resultaba ser popular entre pueblo y se ganaba la confianza de sus compañeros, entonces (y solo entonces) consideraría elevarlo a la posición de primer ministro. A esto se le llama prudencia.

Sin embargo, el faraón puso a José a cargo de su palacio y de todo su pueblo de inmediato, declarando que "solamente en el trono yo seré mayor que tú" (41:40). Y, como si esto fuera poco, la Biblia nos da la siguiente descripción aún más descriptiva: “[el faraon] lo hizo montar en su segundo carro, y proclamaron delante de él: '¡Doblad la rodilla!'. Y lo puso sobre toda la tierra de Egipto" (41:43).

¿Cómo se puede explicar un acontecimiento tan improbable, o más bien imposible? La única explicación es que esto fue completamente un acto de Dios, en el sentido más estricto de esta expresión, puesto que "Como canales de agua es el corazón del rey en la mano del Señor; Él lo dirige donde le place" (Proverbios 21:1).

Encontramos repetidas veces en la historia que a Dios le ha placido actuar así. Lo hizo con el rey de Babilonia Nabucodonosor (Dan. 2:48); lo hizo también con el rey Ciro de Persia (Esdras 1:1).

Día 3

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Génesis 41:46–57

(1) ¿Qué edad tenía José cuando sus hermanos lo vendieron para ser esclavo en Egipto? (ver 37:2)

(2) Intente repasar los eventos de su vida a lo largo de los últimos 13 años, y los principales cambios que experimentó.

(3) Aunque la Biblia no vuelve a mencionar a Potifar y su esposa, ¿cómo piensa usted que habrían sentido (en especial la esposa de Potifar) al escuchar la noticia del cambio de fortuna de José? ¿Cuánto tiempo había pasado hasta su reivindicación?

(4) ¿En qué aspectos cierta etapa de su vida podría parecerse a la de José?

(5) La Biblia no menciona que José haya enfrentado alguna oposición mientras desempeñaba sus deberes como el segundo al mando en Egipto. Pero pensemos lógicamente sobre su contexto. ¿A qué situaciones habría tenido que enfrentarse? ¿Cuál pudo haber sido el aspecto más difícil de sus deberes mientras almacenaba grandes cantidades de grano para el faraón?

(6) Los nombres de los dos hijos de José nos dan mucha información sobre el estado de ánimo de José al lidiar con su pasado:

a. ¿Qué nos muestra el nombre Manasés sobre lo que José pensaba sobre su pasado en su familia?

b. ¿Qué significa el haber olvidado “toda la casa de mi padre”?

c. ¿Qué nos enseña el nombre Efraín sobre lo que José pensaba sobre sus primeros 13 años en Egipto?

d. ¿Y qué pensaba sobre su vida actual en Egipto?

(7) ¿Qué pudieron haber pensado el pueblo y el Faraón hacia el final (pero no al final) de los siete años de abundancia? ¿Cómo se habría sentido José?

(8) Si hubo escepticismo y oposición entre el pueblo durante los primeros siete años, ¿qué habría sucedido cuando comenzaron los años de hambruna "tal como José ha[bía] dicho"?

(9) ¿Cuán severa fue la hambruna? ¿De qué manera una tragedia tan severa nos puede ayudar a entender Romanos 8:28?

(10) ¿De qué manera José es un tipo de Cristo?

(11) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
Dios es fiel

Me sorprende el nombre que José le dio a su primer hijo, Manasés.

Por un lado, José no le dio un nombre egipcio. Uno podría esperar que José le diera un nombre egipcio para ayudarlo a relacionarse mejor con los niños de la corte real durante su crianza. Pero le dio un nombre hebreo; yo creo que lo hizo no solo porque deseaba recordarle a su hijo su identidad, sino (y más importante aún) porque quería recordarle el Dios al que servían. Muchos nombres egipcios estaban relacionados a los dioses a los que servían.

Pero lo que más me llamó la atención fue la declaración en la que el propio José que explica el nombre de su hijo: "Dios me ha hecho olvidar todo mi trabajo y toda la casa de mi padre" (Génesis 41:51).

Es comprensible que haya olvidado todos sus problemas; sin embargo ¿es normal que haya olvidado toda la casa de su padre? ¡Qué declaración tan desgarradora!

Como inmigrante a norteamérica, he observado un fenómeno bastante interesante entre muchos viejos inmigrantes chinos. En mi círculo de amigos y parientes inmigrantes chinos, muchos tienen un alto nivel educativo. Muchos tienen títulos del más alto grado, han conquistado logros notables en sus propios campos de actuación, se han integrado totalmente en la sociedad norteamericana e incluso hablan un inglés muy fluido. Pero me he dado cuenta de que a medida que se acerca la edad de jubilación, muchos de ellos comienzan a ver programas de televisión chinos y a leer periódicos chinos, cosas que rara vez hacían antes. También se ponen nostálgicos y hablan mucho más a menudo sobre su humilde tierra natal. En otras palabras, todos ellos recuerdan sus raíces, algo que es muy natural.

Pero esto no ocurrió en la vida de José. El pasado simplemente era tan doloroso que quería borrarlo por completo de su memoria. Y debido a que su doloroso pasado estaba vinculado a la casa de su padre, quería olvidarlos a ellos también. ¡Su dolor debió haber sido muy profundo! Quizás esto nos ayude a entender por qué sometería a sus hermanos a un poco del dolor que ellos le habían infligido e él.

Pero en sus intentos de borrar de su memoria su doloroso pasado, José habría tenido que lidiar con los sueños que Dios le había dado. Quizás hubiera intentado convencerse de que los sueños realmente no eran de Dios   pero de no ser así, él sabía que no podía simplemente olvidar la casa de su padre, independientemente de cuán doloroso fuera ese recuerdo. Pero el simple hecho de que dio a su primer hijo el nombre Manasés, junto con su propia explicación del nombre, nos muestra que había tomado una decisión consciente de renunciar lo que Dios le había prometido a través de sus sueños.

Pero nuestro Dios es tan fiel que nunca olvidará ni abandonará Su promesa, incluso cuando nosotros lo hayamos hecho. A su debido tiempo, Su mano providencial le trajo a sus hermanos, e incluso a su padre. A pesar de que habría sido una experiencia brutal, puesto que en un instante obligó a José a revivir su doloroso pasado, fue también la única forma en que el dolor de José pudo ser completamente sanado, sin mencionar que cumpliría el propósito mayor de Dios la salvación de la casa de su padre.

Yo también tengo algunos recuerdos del pasado que prefiero no recordar. A menudo me despertaba en medio de la noche, atormentado por algunos de estos dolorosos recuerdos del pasado. Pero Dios me ha enseñado a dar gracias, porque por muy dolorosos que fueran, ya son parte del pasado, y hay demasiados “Efraines(dos veces fructífero) por los que debo dar gracias.

Día 4

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Génesis 42:1–17

(1) Por supuesto, Jacob no sabía cuánto tiempo duraría esta hambruna, pero cuando supo que otros en Canaán habían ido a Egipto en busca de comida, él también ordenó a sus hijos (cuya inacción parece haberlo molestado) que fueran a buscar comida. ¿Por qué no fue Benjamín? ¿Por qué Jacob aún no había renunciado su favoritismo?

(2) ¿Por qué José trató a sus hermanos con tanta aspereza? ¿Todavía les guardaba rencor? ¿Habría sido correcto? ¿Usted aún les habría guardado rencor?

(3) ¿Por qué el recordatorio de sus sueños (los cuales aún no se habían cumplido totalmente) le llevó a acusarlos de ser espías? (v. 9) ¿Piensa usted que José alguna vez pensó que esta reunión realmente sucedería algún día? (ver 41:51)

(4) ¿Acaso no habría sido natural que un grupo de diez hombres que habían llegado juntos y afirmaban ser una sola familia habría despertado desconfianza?

(5) José casi murió en manos de estos hermanos debido a sus celos. ¿Cuál habría sido su preocupación principal en ese momento al ver solo a diez de sus hermanos?

(6) Según José, ¿cómo podrían probar su inocencia? ¿De qué manera esa orden habría puesto en peligro la vida de la familia de su padre, especialmente en esa época de hambre?

(7) ¿Que efecto habría tenido en los hermanos su encarcelamiento durante tres días?

(8) ¿Por qué los hermanos no reconocieron a su propio hermano José, mientras que José los reconoció a ellos? (Más adelante, en el v. 23, vemos que todo el diálogo se llevó a cabo a través de un intérprete).

(9) ¿Qué pensaba José que lograría al dejar a sus hermanos encarcelados durante tres días?

(10) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
Nadie sabe
los problemas que he visto

Probablemente no comprendemos totalmente la lucha interna de José cuando de manera súbita e inesperada tuvo que enfrentarse a sus hermanos, los mismos hermanos que cuando él era muy joven casi le habían quitado la vida, y que efectivamente le habían quitado a su padre. Lo que sabemos sin duda es que el dolor y la tristeza del pasado aún habrían sido muy tangibles en ese momento.

Los invito a meditar en la siguiente canción espiritual que refleja un sentimiento de dolor y tristeza similar a lo que experimentó José. Esta canción fue escrito por alguien que probablemente también había sido esclavo. Al parecer, nadie sabe el origen de esta canción que primero alcanzó popularidad con Marian Anderson, quien tuvo mucho éxito al grabarlo por primera vez en 1925 bajo el sello Victor, aunque la versión de Louis Armstrong es la más conocida.

Nadie sabe los problemas que he visto

Nadie sabe los problemas que he visto
Nadie lo sabe, sólo Jesús
Nadie sabe los problemas que he visto
Gloria, aleluya.

A veces me levanto,
a veces estoy abajo,
Oh, sí Señor
A veces estoy casi
Por el suelo,
Oh sí, Señor

Nadie sabe los problemas que he visto
Nadie lo sabe, sólo Jesús
Nadie sabe los problemas que he visto
Gloria, aleluya.

Si has llegado antes que yo,
Oh, sí Señor
Dile a todos mis amigos: yo también voy,
Oh, sí Señor

Nadie sabe los problemas que he visto
Nadie lo sabe, sólo Jesús
Nadie sabe los problemas que he visto
Gloria, aleluya.

Aunque me ves que me va yendo,
Oh sí, Señor
Tengo mis pruebas, aquí abajo
Oh sí, Señor

Oh, nadie sabe los problemas que he visto
Nadie lo sabe, sólo Jesús
Nadie sabe los problemas que he visto
Gloria, aleluya.

https://www.youtube.com/watch?v=vt14391dQyc


Día 5

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Génesis 42:18–26

(1) ¿Por qué José cambió de opinión y encarceló a uno solo de ellos, dejando ir a los demás?

(2) José sabía que su hermano menor y su padre estaban pasando hambre en casa. También entendía lo gravoso que sería para Jacob permitir que fuera Benjamín. ¿Por qué eligió jugar con sus hermanos?

(3) ¿Qué impacto tuvieron sus tácticas en los hermanos? ¿Por qué esto les habría recordado su pecado?

(4) ¿Qué otra dimensión del sufrimiento de José nos revela la conversación entre los hermanos?

(5) ¿Qué hizo llorar a José?

(6) ¿Por qué José eligió detener a Simeón, el segundo hijo, y no a Rubén, el primogénito?

(7) ¿Qué relación hay entre las acciones de José y el primer sueño que había recordado?

(8) A pesar de que José les estaba enseñando una lección a sus hermanos, ¿qué más hizo para mostrarles su amor?

(9) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
El perdón no es fácil

Pedro una vez hizo la siguiente pregunta a Jesús: “Señor, ¿cuántas veces pecará mi hermano contra mí que yo haya de perdonarlo? ¿Hasta siete veces?" (Mateo 18:21).

La pregunta de Pedro nos muestra simplemente que no es fácil perdonarnos unos a otros. Parece que el motivo principal de su pregunta fue el tema del abuso. Si sigo perdonando a mi hermano mientras que él sigue cometiendo la misma ofensa contra mí, ¿acaso no estoy perpetuando sus pecados?

Pero si fueramos honestos, tendríamos que admitir que la verdadera razón siempre es nuestra falta de disposición para perdonar a nuestro hermano. Y nada más.

A José también se le resultó difícil perdonar a sus hermanos de inmediato. La forma en que José finalmente pudo perdonar a sus hermanos se encuentra en sus dos sueños —es decir, José se dio cuenta de que los sueños se estaban cumpliendo, lo que debe haberlo ayudado a aceptar su suerte mucho más fácilmente. Sin embargo, este reencuentro con sus hermanos fue demasiado repentino. No lo esperaba. Ya había logrado olvidar la casa de su padre (Gén. 41:51). Este encuentro repentino con sus hermanos solo sirvió para desentrañar todas las heridas del pasado que, en parte, le habían sobrevenido a causa de sus sueños.

Sus acciones posteriores podrían haber puesto en peligro la vida de la familia de su padre. No era seguro viajar en aquellos días. La severa hambruna solo habría aumentado el peligro de los robos. El hecho de que volvieron a poner la plata en los costales de los hermanos habría significado que estos no se atreverían a regresar. Fue solo debido a la providencia de Dios que todos los planes de José funcionaron perfectamente para lograr Su propósito, el cual era la salvación de toda su familia.

Creo que a pesar de lo difícil que le habría resultado para José perdonar instantáneamente a sus hermanos, su corazón se fue ablandando de modo que en lugar de detener a nueve de ellos y dejar que solo uno volviera, decidió hacer lo contrario; lloró al escuchar la confesión de sus hermanos, llegando a comprender que Rubén había intentado salvarlo. Con el tiempo, llegó a comprender que había sido el propósito de Dios enviarlo a Egipto con el fin de salvar a toda la familia de su padre.

A los pocos, a medida que José aprendió a perdonar, sus heridas del pasado comenzaron a sanarse. Cuando finalmente logró perdonar plenamente, su proceso de curación ya estaba completo.

¿Y usted? ¿Su proceso de curación ya está completo?

Día 6

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Génesis 42:27–38

(1) ¿Qué habrían pensado los hermanos al descubrir la plata en sus costales? ¿Por qué temblaron y se les sobresaltó el corazón?

(2) El versículo 28 registra la primera mención del nombre de Dios por estos hermanos en todo el relato. ¿Qué quisieron decir con la expresión "¿Qué es esto que Dios nos ha hecho?"

(3) ¿Qué les había prometido José si podían demostrar que su historia era cierta?

(4) ¿Cómo respondió Jacob ante su dilema? ¿Por qué consideró que Simeón "ya no existe"? ¿Qué pensaba él hacer por Simeón?

(5) ¿Qué le ofreció Rubén a su padre? ¿Por qué?

(6) ¿Por qué dijo Jacob sobre Benjamín “me queda solo él”?

(7) ¿Por qué no aceptó la oferta de Rubén, su hijo mayor?

(8) Impulsado por la autocompasión, Jacob exclamó, "todas estas cosas son contra mí". ¿Alguna vez usted ha sentido así?

(9) ¿Qué debería haber hecho Jacob en su dilema? ¿Qué habría hecho usted?

(10) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
La autocompasión es destructiva

Alguien (presumiblemente un experto) ha escrito lo siguiente: “La autocompasión es una forma extrema de egocentrismo que, por lo general, es el resultado de una perspectiva muy egoísta del mundo. Las personas que habitualmente practican la autocompasión son infelices, y tienden a hacer que los demás también se sientan bastante infelices". No puedo estar más de acuerdo con este autor.

Jacob fue un ejemplo típico de esto.

Cuando la familia enfrentó una hambruna severa, él envió a sus hijos a Egipto a comprar comida; y aunque regresaron con comida, regresaron sin Simeón. También escuchó como el desconocido egipcio que estaba a cargo había exigido ver a su hijo menor, Benjamín, y que de lo contrario no podrían recuperar a Simeón ni obtener más comida.

Al escucharlo, Jacob echó toda la culpa a sus hijos, diciendo: “Me habéis privado de mis hijos; José ya no existe, y Simeón ya no existe, y os queréis llevar a Benjamín; todas estas cosas son contra mí" (Génesis 42:36).

Pero sin saberlo, Jacob había dicho la verdad. Estos diez hermanos de hecho habían contribuido a la pérdida de José, pero ese fue el alcance de su culpa.

Era cierto que él y su familia estaban enfrentando una hambruna muy severa, pero la hambruna también estaba afectando a todos los demás que vivían en la región.

Simeón de hecho estaba detenido; sin embargo, su destino ahora dependía de Jacob y no de los hermanos.

La decisión de permitir que Benjamín fuera con ellos dependía totalmente de él. Jacob decidiría el destino no solo de Benjamín, sino de toda su familia. Casi setenta vidas, incluidas las de sus pequeños nietos, dependían de su decisión (Gén. 46:27).

El amor de Jacob por uno de sus hijos, Benjamín, era tan fuerte que él estuvo dispuesto a poner en peligro la vida de su familia. En lugar de tomar las medidas necesarias para salvar a toda su familia, él simplemente recurrió a la autocompasión, diciendo "¡Todas estas cosas son contra mí!".

¿Acaso nunca había enfrentado a desafíos mayores que este en su vida? Por supuesto que huyó para salvar su vida sin ningún centavo en el bolsillo; ¡incluso se enfrentó al hermano al que había engañado, que venía con su séquito de cientos de hombres!

¿Cómo había logrado superar estos desafíos? Lo hizo poniendo su confianza en Dios, el Dios que de manera clarísima le prometió una y otra vez su bendición sobre él, la cual incluía no solo la entrega de la Tierra Prometida, sino la multiplicación de sus descendientes (35:11-12).

Aunque es cierto que en este asunto estaba siendo puesto entre la espada y la pared, en lugar de buscar el rostro de Dios como había comenzado a aprender a hacer, Jacob eligió la autocompasión.

Sí, esto es una forma de egocentrismo. Lo único que le importaba a Jacob era él mismo y su hijo favorito, y todo esto sin duda era el resultado de una perspectiva muy egoísta del mundo. El resto de la familia no tenía valor para él. Dios y su plan del pacto no eran importantes para él en absoluto.

¡No hay duda de que Jacob era infeliz y había hecho que los demás a su alrededor se sintieran aún más infelices!

Cuando Elizabeth Elliot perdió a su esposo misionero, quien había sido asesinado por el pueblo indígena conocido como los Auca, a quienes buscaba evangelizar, ella entró en depresión. Esto es lo que escribió después: “Entonces intento rechazar la autocompasión. No conozco nada más paralizante, más mortífero, que la autocompasión. Es una muerte que no tiene resurrección, un sumidero del que ninguna mano salvadora te puede arrastrar, porque tú mismo has elegido hundirte en ello. Pero debe ser rechazada". Más tarde, ella llevó adelante la obra inconclusa de su marido y sus compañeros entre los Auca en Ecuador.

Día 7

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Génesis 43:1–15

(1) A la luz de lo que había sucedido, ¿cómo tuvo Jacob la osadía de pedir a sus hijos que regresaran a Egipto? ¿Cuán desesperado estaba?

(2) Simeón estaba detenido en Egipto, y Rubén aparentemente había perdido su credibilidad ante su padre (recuerde que él se había acostado con la esposa de su padre); por lo tanto, Judá tomó la iniciativa de hablar, asumiendo (sin saberlo) su papel como el heredero elegido del Pacto Abrahámico. ¿Cómo logró convencer a su padre?

(3) Al permitir que Benjamín fuera con ellos, ¿qué actitud estaba tomando Jacob que no había tenido antes?

(4) Si Jacob hubiera decidido recordar las diversas apariciones y promesas que Dios le había hecho, ¿cómo estos recuerdos habrían cambiado su actitud mientras lidiaba con las terribles consecuencias de esta severa hambruna?

(5) ¿Por qué no recordó ni confió en las promesas de Dios?

(6) ¿En qué confiaba ahora?

(7) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
Misericordias severas

"Dios usó una hambruna sobre la cual nadie tenía control para doblegar a la poderosa nación de Egipto con el fin de salvar a su pueblo y exaltarlo. El habla áspera de José fue otra misericordia severa que Dios usó para castigar, probar y enseñar a esta familia destrozada. Cuando comienza esta escena, la familia considera a José como muerto, y él mismo no hace ningún esfuerzo por regresar con ellos; Jacob continúa lamentando la pérdida de José y tal vez sospecha de sus hijos; los hermanos sólo pueden 'mirarse' en lugar de trabajar juntos por el bien común; además, sufren con una conciencia de culpa oculta. En resumen, están alejados de Dios y unos de otros.

"Mediante la hambruna, Dios inició el proceso de salvación obligando a la familia a confrontar su pasado y sus problemas interpersonales. La dureza de José también ayudó a sanar estas roturas y a devolver a la familia a Dios. La detención de Simeón en Egipto les recordó a los diez hermanos cómo ellos habían tratado a José, y por primera vez reconocieron que el Gobernador Moral del universo estaba obrando en sus vidas. Sus conciencias fueron despertadas, de modo que confesaron su culpa (42:21-24) y temieron a Dios (42:28). Asumieron la responsabilidad de sacar a Simeón de la prisión (42:19, 24) y de proteger a Benjamín de cualquier daño (42:37; ver 43:1-45:28). Antes de volver, se mostraron sensibles a las emociones de su padre al contarle nuevamente sus aventuras de una manera que calmará sus temores. La confesión de su culpa hizo llorar a José. En todo esto se comienzan a formar la fe, el arrepentimiento, las tiernas emociones y la lealtad que unen a una familia. Por medio de la hambruna, José llega a gobernar Egipto y los hijos de Israel se vuelven dignos de ser llamados el pueblo de Dios. Tanto el hambre enviado por Dios como las ásperas palabras de José confrontan a los hermanos con una situación de vida y muerte (42:18, 20). Mediante estas severas misericordias, esta familia rota comienza a ser sanada."

(Extracto de Waltke, Génesis, p.550)