Guía devocional de la Biblia

Día 1

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Números 33:1–56

Esta semana terminaremos nuestro estudio del libro de Números y comenzaremos el estudio de los libros de 1 y 2 Reyes en el Antiguo Testamento.

Aunque este capítulo es extenso, la mayor parte contiene el itinerario de los viajes de Israel a lo largo de los 40 años desde el Éxodo hasta su llegada a la frontera de Canaán. Vale la pena señalar que esta sección menciona un total de 42 sitios, incluido Rameses en Egipto.

33:1-2El mandamiento para redactar el itinerario

(1) En su lista de todos los sitios en los que los israelitas habían detenido, la Biblia los llama "etapas": ¿Qué podría sugerir el uso de ese término?

(2) ¿Por qué Dios le pidió a Moisés específicamente que registrara todas estas etapas? ¿Cuál habrá sido el propósito (o propósitos) espiritual(es)?

33:3-49—Los 42 sitios

(3) En la descripción de la partida de Egipto, ¿cuán importantes fueron los siguientes recordatorios?

a. Marcharon con mano poderosa a la vista de todos los egipcios

b. Los egipcios estaban sepultando a todos sus primogénitos

c. Jehová había ejecutado juicios contra sus dioses

(4) En su opinión, ¿qué idea transmite esta lista tan larga de 42 ciudades con respecto a lo siguiente?

a. las dificultades (ver Deuteronomio 1:19)

b. la gracia de Dios (Deuteronomio 1:31; 32:10 y ss.)

c. el castigo (Números 32:10-13; 33:38)

d. Aunque esta lista no pretende ser un registro exhaustivo de todas las ciudades por las que pasaron, Wenham señala que es posible dividirla en seis listas de "siete" nombres que apuntan a una sentido de "completitud" espiritual. ¿Qué piensa usted?

33:50-56—Instrucciones para expulsar y destruir

(5) Después de la lista de lugares por donde pasaron los israelitas en su viaje durante sus cuarenta años en el desierto, ¿qué instrucciones específicas les dio Dios? Por qué

(6) ¿Cuáles serían las consecuencias si no obedecieran?

(7) ¿Por qué se dieron estas instrucciones en este momento específico?

(8) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
Un
a travesía llena de gracia

Moisés escribió sus salidas conforme a sus jornadas por mandato de Jehová...” (RVR1960) (Núm. 33:2)

Uno se pregunta por qué Dios “mandaría” a Moisés que hiciera un registro de las diversas etapas de su viaje por el desierto, especialmente justo después de la muerte de Aarón (33:38-39) cuando el pueblo estaba en la frontera de Canaán a punto de entrar en la Tierra Prometida.

Aunque Dios no le explicó a Moisés el propósito de hacer esta lista, usó la palabra "etapas" para referirse a los segmentos de su viaje, y aunque la lista no es exhaustiva, contiene unos 42 sitios diferentes, lo cual ciertamente apunta a la duración y las dificultades del viaje de los israelitas. Además, las instrucciones finales en la conclusión del itinerario (vv. 50-55) muestran claramente que se trata de más que un simple itinerario; sirve como un recordatorio de la gracia de Dios y las lecciones que deberían haber aprendido de sus rebeliones a lo largo del viaje. Esto queda bien resumido en las siguientes palabras de los primeros capítulos de Deuteronomio:

Y salidos de Horeb, anduvimos todo aquel grande y terrible desierto que habéis visto, por el camino del monte del amorreo, como Jehová nuestro Dios nos lo mandó; y llegamos hasta Cades-barnea.” (RVR1960) (Deut. 1:19)

En muchos sentidos, el itinerario de los israelitas es una figura del "camino de la vida" de cada cristiano. Es un viaje de fe que Dios nos ha mandado que emprendamos. Es un viaje tanto de fe como de gracia. La intención de Dios nunca fue que fuera un "grande y terrible desierto"; lo que la ha convertido en una experiencia desértica es nuestro propio pecado y rebelión. En lugar de viajar por caminos rectos, a menudo optamos por desviarnos y dar vueltas torcidas; en lugar de constantes victorias, nuestra falta de fe, nuestras quejas sobre las dificultades y nuestros pecados deliberados nos hacen ver más pérdidas que victorias.

Pero a pesar de todo, Dios nunca nos ha dejado ni nos ha desamparado, como atestiguan las siguientes palabras en Deuteronomio:

Le halló en tierra de desierto, Y en yermo de horrible soledad; Lo trajo alrededor, lo instruyó, Lo guardó como a la niña de su ojo. Como el águila que excita su nidada, Revolotea sobre sus pollos, Extiende sus alas, los toma, Los lleva sobre sus plumas, Jehová solo le guio…”  (RVR1960) (Deut. 32:10-12).

Así como este fue para los israelitas un viaje lleno de gracia, el nuestro también lo es. Por lo tanto, independientemente de la etapa en la que nos encontremos en nuestra vida hoy, o de lo "grande y terrible" que sea o haya sido su experiencia en el desierto, hay que recordar que estos son sólo "etapas" en su viaje; Dios lo llevará a la Tierra Prometida y usted encontrará descanso en Él.

Día 2

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Números 34:1–29

34:1-15—El establecimiento de las fronteras de Israel (ver la Nota a continuación)

(1) Aunque quizás no sea posible hoy identificar cuáles fueron exactamente las fronteras que fueron asignadas a estas nueve de las doce tribus de Israel al oeste del río Jordán, ¿cuál fue la posible razón (o razones) para establecer estas fronteras en ese momento?

(2) ¿Qué condiciones fueron impuestas a la concesión de estos territorios? (ver Levítico 26:14, 32-35)

(3) Ante la perspectiva de una eventual pérdida de su tierra, ¿qué razones dio Jehová para su destrucción? (ver Jeremías 44:22)

(4) ¿Piensa usted que el Israel de hoy todavía tiene el derecho de reclamar estas tierras legítimamente como propiedad de la nación? ¿Por qué o por qué no?

(5) Ezequiel (después de la destrucción de los reinos norte y sur) reiteró estos límites nuevamente (Ezequiel 47:13-20). ¿Cuál pudo haber sido su razón (o razones) para hacerlo?

34:16-29Los nombres de los líderes para la distribución de tierras

(6) ¿Quiénes fueron las personas asignadas para llevar a cabo la distribución de tierras?

(7) ¿Qué papel tuvo Eleazar?

(8) ¿Qué papel tuvo Josué?

(9) Póngase en el lugar de uno de estos líderes (excepto Caleb, los demás eran básicamente desconocidos). ¿Cómo usted se hubiera sentido si lo hubieran nombrado para participar de un comité cuyo propósito era dividir tierras que eran básicamente "terrenos en un mapa", los cuales estaban ocupadas por residentes nativos que sin duda se opondrían ferozmente contra cualquier invasión?

(10) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Nota:

Tenga en cuenta que las ubicaciones de muchos de los sitios mencionados en este pasaje siguen siendo desconocidas, especialmente los que se encontraban en su frontera septentrional. Pero a pesar de esta falta de información, aún tenemos una idea general de sus fronteras, puesto que la designación más común que se usa para referirse al territorio es de “Dan a Beerseba” (1 Sam. 3:20). Entre los demás pasajes de la Biblia que describen sus fronteras están Génesis 15:18, Éxodo 23:31; Josué 1:4; Ezequiel 47:13-20, etc. En todo caso, “este pasaje presenta una cuadro bastante preciso de la tierra de Canaán que está en sintonía con los textos del Oriente Próximo de mediados del siglo XV a.C. en adelante, y que coincide especialmente bien con los dados del territorio en el distrito egipcio de Canaán en la segunda mitad del siglo XIII a.C., al menos según Y. Aharoni" (NICOT, Números, 639).

Reflexión meditativa
Establecer
fronteras

"esta será vuestra tierra por sus límites alrededor." (RVR1960) (Números 34:12)

Los límites de la Tierra Prometida son mencionadas por primera vez en Génesis 15, cuando Dios hizo Su promesa a Abraham:

En aquel día hizo Jehová un pacto con Abram, diciendo: 'A tu descendencia daré esta tierra, desde el río de Egipto hasta el río grande, el río Éufrates; la tierra de los ceneos, los cenezeos, los cadmoneos, los heteos, los ferezeos, los refaítas, los amorreos, los cananeos, los gergeseos y los jebuseos' ” (RVR1960) (Génesis 15:18-21).

Dios hizo esta promesa en respuesta a la fiel obediencia de Abraham al dejar su tierra natal, y también en combinación con Su promesa sobre una “descendencia”. Para Abraham en ese momento, un peregrino con unos cuantos sirvientes domésticos que vivía en una tierra extranjera, esta promesa era increíble y extravagante. Las fronteras que Dios había mencionado eran impensables.

Pero a pesar de lo impensable que era, el que había hecho la promesa no era otro que el Dios Todopoderoso; por lo tanto, después de unos 700 años, los descendientes de Abraham, encabezados por Moisés, estaban a punto de entrar en esta Tierra Prometida.

El establecimiento de estas fronteras es un testimonio de la fidelidad y la grandeza de Jehová. Lo que antes era impensable se estaba haciendo realidad. Por otro lado, creo que otra función que tuvieron estas fronteras en la historia posterior de Israel fue poner un límite a la agresión ambiciosa de los gobernantes y reyes de Israel. Necesitaban aprender a estar contentos con lo que Dios les había dado, como el sentimiento que David expresó en el Salmo 16:

Jehová es la porción de mi herencia y de mi copa; Tú sustentas mi suerte. Las cuerdas me cayeron en lugares deleitosos, Y es hermosa la heredad que me ha tocado" (Salmos 16:5-6).

Día 3

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Números 35:1–34

35:1-8—Ciudades y pastos para los levitas

(1) Aunque los levitas no recibirían tierra alguna como herencia, se les proporcionarían ciudades donde podrían vivir y pastos para su ganado y sus rebaños. En este sentido los levitas no "poseerían" ninguna tierra, pero en realidad no serían diferentes de las demás personas. ¿Está usted de acuerdo? ¿Por qué o por qué no?

(2) ¿Cuál era el tamaño real de los pastos que recibirían los levitas en cada una de las ciudades que les fueron dadas (probablemente no exclusivamente)?

(3) Puesto que un acre = 4047 metros cuadrados (0,4047 hectáreas; 43,560 pies cuadrados), ¿cuál sería el tamaño (en hectáreas) de cada uno de los pastos?

(4) ¿Por qué las seis ciudades de refugio estarían entre los 48 pueblos habitados por los levitas?

35:9-34Las seis ciudades de refugio

(5) ¿Dónde estarían ubicadas las seis ciudades de refugio? (v. 14)

(6) El procedimiento para lidiar con una muerte accidental:

a. Aunque el homicidio pudiera ser accidental, ¿el homicida tendría que enfrentar un juicio? ¿Cómo? (vv. 12, 24)

b. ¿De qué manera la ciudad serviría de refugio antes del juicio? (v. 12)

c. ¿Qué constituye un homicidio involuntario? (vv. 22-23)

d. ¿Qué pasaría con el homicida involuntario? ¿Por qué? (vv. 25, 28)

e. ¿Qué pasaría si el asesino abandonara la ciudad de refugio antes del tiempo señalado? (v. 27)

(7) El procedimiento para lidiar con los asesinos

a. Además del uso en el asesinato de los objetos mencionados, ¿qué, en esencia, constituye un asesinato? (vv. 20-21)

b. ¿Cual es el castigo? (vv. 19, 21)

c. ¿Cómo se debía confirmar una acusación de asesinato? ¿Por qué? (vv. 30, 32)

d. ¿Por qué no se aceptaría ningún rescate por la vida de un asesino? (vv. 31, 33-34)

e. ¿Piensa usted que este principio aún debería aplicarse hoy? ¿Por qué o por qué no?

(8) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
La muerte del sumo sacerdote

"[El acusado] morará en ella hasta que muera el sumo sacerdote, el cual fue ungido con el aceite santo." (RVR1960) (Núm. 35:25b)

Los requisitos legales establecidos sobre cómo lidiar con el homicidio involuntario y el asesinato son bastante justos y sólidos, y la provisión de ciudades de refugio, tanto para la protección del acusado (para que se pudiera realizar un juicio adecuado para determinar si se trataba de un homicidio intencional o asesinato), como para (en el caso de homicidio involuntario comprobado) la protección continua para la persona por el resto de su vida, también es sin duda justa y humana.

Sin embargo, tal véz uno se pregunte por qué el homicida involuntario tenía que quedarse en la ciudad de refugio mientras el sumo sacerdote de su época aún vivía, pero podía irse una vez que el sumo sacerdote muriera. En otras palabras, si el sumo sacerdote llegara a vivir durante mucho, mucho tiempo, el culpable del homicidio involuntario tendría que cumplir el equivalente de una cadena perpetua. Por otro lado, hipotéticamente, si el sumo sacerdote llegara a morir dentro de una semana después de su veredicto, el homicida saldría libre casi de inmediato.

Gregorio el Grande (ca. 540-600 +) pensaba lo siguiente sobre este asunto (según lo cita su secretario Paterius): “¿Qué otra cosa significaría que un homicidio volviera para la absolución después de la muerte del sumo sacerdote, sino que la raza humana, que mediante el pecado trajo la muerte sobre sí misma, recibe la absolución de su culpa después de la muerte del verdadero sacerdote, es decir, nuestro Redentor” (ACC S, III, 273).

Esto es un presagio poderoso de la absolución de nuestros pecados que tenemos mediante la muerte de nuestro Señor Jesucristo, por la cual incluso el ladrón en la cruz junto a Él pudo recibir el perdón pleno e instantáneo tras su arrepentimiento, de modo que el Señor le dijo: “En verdad te digo: hoy estarás conmigo en el paraíso" (Lucas 23:43).

Día 4

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Números 36:1–13

(1) ¿Por qué les debía importar tanto a los jefes de familia del clan de Galaad la posibilidad de que la tierra de su hermano Zelofehad se perdiera y fuera propiedad de otra tribu?

(2) ¿Acaso no deberíamos pensar, "Es solo tierra, y después de todo no pertenecerá a los extranjeros sino que permanecerá una posesión de Israel"?

(3) En la opinión de estos jefes, ¿la solución de este problema se encontraba en la legislación sobre el año de Jubileo, la cual trata sobre tierras compradas y no heredadas (en Levítico 25:13 y ss.)? (36:4)

(4) Por lo tanto, ¿por qué dijo el Señor (a través de Moisés) que tenían razón? (36:5)

(5) ¿Por qué la tierra no debería ser traspasada “de una tribu a otra tribu”? (36:9)

(6) ¿Qué hicieron las hijas de Zelofehad? ¿Por qué?

(7) ¿Que nos enseña esta anécdota sobre el Dios de Israel?

(8) Al llegar al final de este libro, le sugiero que lea las notas que ha tomado a lo largo de las últimas 7-8 semanas o hojee las páginas de Números, reflexionando sobre los principales acontecimientos de estos 40 años de la historia de Israel. ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
La here
dad que proviene de Dios

"ninguna heredad será traspasada de una tribu a otra tribu, pues las tribus de los hijos de Israel retendrán cada una su propia heredad." (LBLA) (Números 36:9)

A primera vista, nos podría molestar el hecho de que los jefes de familia del clan de Gilead intentaran disputar por la futura heredad que se asignaría a las hijas de Zelofehad. No se trataba de mucha tierra, solo las heredades que recibiría una única familia la familia de Zelofehad. También tendemos a pensar que se trata de una simple cuestión de tierra: siempre que estas mujeres se casaran con israelitas de otras tribus, la tierra permanecería dentro de Israel. ¿Por qué tenían una mentalidad tan territorial?

Al final resultó que incluso Jehová estuvo de acuerdo con ellos: dijo que tenían razón y añadió disposiciones en la legislación para asegurar que “ninguna heredad será traspasada de una tribu a otra tribu” (36:9).

Yo creo que, aparte de las cuestiones de justicia, estas disposiciones realmente reflejan el deseo de Dios de desalentar la codicia que resulta en una acumulación indebida de tierras, y de hacer cumplir el objetivo de las leyes del Jubileo: evitar la pobreza extrema y perpetua y garantizar que todas las propiedades vendidas o hipotecadas volvieran a sus dueños originales, y por ende, a las tribus originales (ver Levítico 25:13-55).

Si no fuera por esta legislación añadida en el capítulo 36, el único efecto del Año del Jubileo (que se ocupa solamente de las propiedades compradas) sería confirmar la pérdida perpetua de la tierra de la tribu Manasés, en caso de que las hijas de Zelofehad se casaran con hombres de otras tribus.

No es de extrañar que el Señor estuviera de acuerdo con los jefes de familia del clan de Galaad, puesto que estos en realidad no estaban peleando para sí mismos ellos mismos morirían mucho tiempo antes de la llegada del Año del Jubileo en la Tierra Prometida; lo que realmente les importaba era que se hiciera justicia y que hubiera estabilidad a largo plazo para la comunidad de Israel.