Guía devocional de la Biblia

Día 1

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Jueces 3:7–11

Esta semana continuaremos el estudio del Libro de los Jueces del Antiguo Testamento.

En este pasaje la Biblia nos proporciona detalles sobre este círculo vicioso, comenzando con el primer juez, Otoniel:

(1) Explique lo que usted ya sabe acerca de Otoniel (Jueces 1:12-15).

(2) ¿Qué impresión tuvo usted de él antes de leer que Dios lo levantó como el primer juez?

(3) ¿De qué manera este pasaje cambió su opinión sobre él?

(4) ¿Cómo describe la Biblia los pecados de los israelitas que les acarreó la ira de Dios?

(5) ¿Por qué dice la Biblia que Jehová “los vendió en manos de Cusán-risataim, rey de Mesopotamia”? ¿Qué quiere decir "vendió"?

(6) ¿Cuánto tiempo los israelitas vivieron como súbditos de Aram-najarayim?

(7) ¿Por qué pasaron ocho años antes de que clamaran a Jehová?

(8) ¿Por qué Dios escucharía su clamor? ¿Lo haría si usted fuera Dios?

(9) ¿Por qué Otoniel esperó ocho años antes de enfrentarse a Cusán-risataim?

(10) ¿Cuánto tiempo duró la época de paz que siguió?

(11) ¿Qué ha aprendido acerca del Espíritu de Jehová?

(12) Haga una pausa para reflexionar sobre el mensaje principal para usted hoy.  ¿Cómo puede aplicarlo a su vida?

Nota:

Se cree que Aram-najarayim estaba ubicada en la región septentrional de Mesopotamia, a una distancia bastante grande de Israel.

Reflexión meditativa
Otoniel, el primer juez: ¿una elección improbable?

Entonces clamaron los hijos de Israel a Jehová; y Jehová levantó un libertador a los hijos de Israel y los libró; esto es, a Otoniel hijo de Cenaz, hermano menor de Caleb." (RVR1960) (Jueces 3:9)

Otoniel fue el primero de los 15 jueces que Dios levantó para liberar a los israelitas cuando caían repetidas veces en el círculo vicioso de rebelión, opresión, clamor y liberación por parte de Jehová a través de un juez. Aunque estos jueces fueron principalmente gobernantes militares y no líderes espirituales, tengo la impresión de que la mayoría de ellos impactaron la vida espiritual del pueblo, al menos lo suficiente como para garantizarles un tiempo de paz hasta su propia muerte, momento en el que el pueblo se rebelaba descaradamente contra Jehová, practicando el mal, olvidándose de Él y sirviendo a otros dioses de la tierra, tal como se describe en Jueces 3:7.

Cuando primero se mencionó a Otoniel en 1:12-15, tuve la impresión de que aunque era un guerrero lo suficientemente fuerte como para capturar a Quiriat-séfer para Caleb, por dentro era una persona mansa. No permitió que su esposa lo manipulara para exigir más tierras a su suegro, lo que sugiere contentamiento o falta de agresividad. Una persona así difícilmente estaría calificada para ser un juez libertador que pudiera unificar a los israelitas. Pero una vez más vi que yo estaba equivocado, y una vez más Dios eligió a aquél que quizás eras el menos probable a los ojos de los hombres.

Pasaron ocho años de cautiverio antes de que Otoniel se levantara y luchara contra Cusán-risataim. Obviamente, no fue por su propia iniciativa ni por su propia elección. Sin el llamado de Dios y la venida del Espíritu del Señor sobre él, no se habría atrevido a luchar contra un enemigo tan formidable, ni podría haber logrado ser el juez del pueblo y darles paz durante cuarenta añosun período de tiempo relativamente largo.

Quizás también es apropiado que Dios haya elegido a un descendiente de Judá como el primer juez, ya que más tarde el Mesíasel Juez Supremo y Libertador, nuestro Señor Jesucristo vendría de la tribu de Judá.

Día 2

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Jueces 3:12–31

(1) ¿Usted recuerda cuánto tiempo Israel disfrutó de la paz hasta que “volvieron los hijos de Israel a hacer lo malo ante los ojos de Jehová”?

(2) Si bien los jueces no eran necesariamente líderes espirituales, ¿cómo se puede explicar la “demora” del pueblo en rebelarse nuevamente contra Jehová?

(3) ¿Quiénes eran los enemigos que Dios levantó para disciplinarlos? (Si su Biblia tiene mapas al final, consúltelos para ver de dónde eran.) ¿Está usted de acuerdo en decir que fue Jehová quien levantó a Eglón para disciplinar a Israel? ¿Por qué o por qué no?

(4) ¿Cuánto tiempo vivieron como súbditos del rey de Moab? Esta vez, ¿cuánto tiempo más tardaron los israelitas en clamar a Jehová?

(5) Con base en este relato detallado, ¿cuánto sabe usted sobre Aod con respecto a lo siguiente?

a. quién era

b. de dónde era

c. cómo se había preparado

d. el riesgo que corrió

e. la forma en que asumió el liderazgo de su pueblo

(6) ¿Cuán grande fue su victoria?

(7) ¿Cuánto tiempo duró el período de paz que siguió?

(8) Parece que durante este mismo período de 80 años Samgar también fue levantado por Dios para salvar a Israel. ¿Qué deberían haber aprendido los israelitas de estas experiencias?

(9) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Nota:
"La Ciudad de las Palmas" probablemente es una referencia a la ciudad de Jericó.

Reflexión meditativa
Aod, el segundo juez: ¿una guerrero automotivado?

Y clamaron los hijos de Israel a Jehová; y Jehová les levantó un libertador, a Aod hijo de Gera, benjamita, el cual era zurdo…” (RVR1960) (Jueces 3:15)

El segundo juez a quien Dios levantó fue un benjaminita llamado Aod. Es interesante notar que la Biblia menciona específicamente que era zurdo. Quizás según la mentalidad de la época las personas debían luchar con la mano derecha, y por lo tanto el rey de Moab no estaba preparado en absoluto cuando Aod alargó la mano izquierda y tomo la espada atada a su muslo derecho (3:21).

De todos modos, parece que Aod fue un guerrero muy diferente de Otoniel, el primer juez. Había sido enviado por el pueblo para llevar el tributo al rey de Moab, lo que naturalmente sugiere que era un líder reconocido entre su pueblo.

Aod obviamente era un hombre astuto que había planeado este asesinato con mucha anticipaciónhabía hecho una espada lo suficientemente corta como para esconderlo en su muslo, había despedido a los hombres que lo acompañaban para no despertar sospechas y había desarrollado una buena relación con el rey para ganar su confianza. Aunque la Biblia no menciona la frase de suma importancia, "el Espíritu de Jehová vino sobre [el]", no quiere decir que no fuera enviado por Jehová como libertador de Israel. Por lo tanto, aunque parece que Aod era un guerrero automotivado que asumió la tarea de salvar a su pueblo, eso no significa que no dependiera de Jehová. Cuando llamó a los israelitas a que lo siguieran, dijo: "porque Jehová ha entregado a vuestros enemigos los moabitas en vuestras manos" (3:28).

Supongo que la lección que debemos aprender de esto es que no debemos intentar encajar a Dios y Sus caminos en nuestra “cajita”. Él puede utilizar a todo tipo de personas para lograr Sus planes y propósitos.

Día 3

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Jueces 4:1–10

(1) ¿Recuerda usted cuánto tiempo Israel disfrutó de la paz hasta que “volvieron a hacer lo malo ante los ojos de Jehová”?

(2) ¿Cuán fuerte era este nuevo enemigo de Israel, y por cuánto tiempo lo oprimió?

(3) Con base en la descripción de Débora, ¿qué sabemos sobre los "jueces"?

(4) ¿Cuán especial fue Débora como juez?

(5) ¿Cuál fue el mensaje que Jehová le dio a Débora?

(6) ¿Por qué Barac no estuvo dispuesto a escuchar? ¿Puede usted culparlo?

(7) ¿Qué razón dio Débora con respecto a su renuencia inicial de ir con Barac?

(8) ¿Qué había de malo en que Dios usara a una mujer para liberar a Israel?

(9) Con base en ello, ¿qué más podemos aprender sobre Débora?

(10) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
Barac: una
oportunidad perdida de ejercer la fe

Le respondió Barac: 'Si tú vas conmigo, yo iré; pero si no vas conmigo, no iré'.” (LBLA) (Jueces 4:8)

Débora fue el tercer juez que Dios levantó para liberar a los israelitas. Es obvio que ella entendía la cultura de su tiempo (y el orden de la creación de Dios); por lo tanto buscó dar a Barac el honor y la tarea de salvar a Israel. En esencia, según la jerga legal actual, le dio a Barac el derecho preferente.

La Biblia dice claramente que Débora era una profetisa y que se sentaba a juzgar bajo la Palma de Débora. En otras palabras, ella no solo juzgaba a Israel; también era la mensajera de Dios. Le dijo a Barac en términos inequívocos: "¿No te ha mandado Jehová Dios de Israel?" (4:6). Por tanto, la negativa de Barac a cumplir su misión solo fue una desobediencia directa al mandamiento de Jehová.

Su renuencia a ir solo es entendible: el enemigo tenía 900 carros, algo que en aquellos días representaba un ejército que, desde una perspectiva humana, los israelitas no podían igualar.

Quizás, como suele suceder con muchos cristianos de hoy, la fe de Barac no era una fe de primera mano en Jehová. No había depositado su fe en el Dios invisible, sino en el líder humano visible, es decir, en Débora. El resultado no fue tanto que el honor de la victoria fuera para una mujer, ni tampoco que Barac haya perdido la oportunidad de ser juez, sino que perdió la oportunidad de desarrollar una relación de fe directa y de primera mano en Jehová.

Día 4

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Jueces 4:11–24

(1) El relato de este conflicto menciona a los ceneos, un grupo que no era parte de Israel. ¿Fue necesariamente un error que Israel permitiera que gentiles permanecieran entre ellos? (Jueces 1:16) ¿Por qué o por qué no?

(2) ¿Cuán formidable era el ejército de Sísara ?

(3) ¿Por qué Barac estuvo dispuesto a enfrentarse a Sísara ?

(4) ¿Cuál fue el resultado de su acción?

(5) Según la información en el relato bíblico sobre Jael, ¿cómo la describiría usted con respecto a lo siguiente?

a. la razón por la qué decidió traicionar su amistad

b. su coraje

c. su relación con Israel y su Dios

(6) ¿Piensa usted que la "mujer" a la que se refiere 4:9 es Débora o Jael? ¿Qué papel desempeñó cada una en la liberación de Israel?

(7) ¿Cuál pudo haber sido la mayor "pérdida" para Barac? ¿Realmente fue la pérdida de "honor"? (4:9)

(8) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
El honor
le pertenece a ...

"No será tuya la gloria de la jornada que emprendes, porque en mano de mujer venderá Jehová a Sísara." (RVR1960) (Jueces 4:9)

Sin duda, Jael fue una mujer muy especial que merecía ser llamada bendita por Débora (5:24).

La admiro por las siguientes razones:

(1) Ella en realidad no era israelita; era cenea de ascendencia madianita. Es cierto que los israelitas, en lugar de expulsarlos como hicieron con otros cananeos que habitaban en la región, les permitieron vivir entre ellos, muy probablemente debido a su relación con Moisés (4:11). Sin embargo, su familia se había ido de Judá, mudándose para el norte. En otras palabras, ella no tenía ninguna obligación con el pueblo de Israel. Por el contrario, su clan tenía cierta relación con Jabin, el rey de Hazor (4:17). Por lo tanto, sería más natural que ella tomara el partido del último.

(2) Es posible que su decisión de tomar el partido de Israel sea (como opinan muchos comentaristas) una señal de que en realidad había tomado el partido de Yahvé. Con su acción mostró que ya había hecho a Yahvé su Dios.

Aun así, el asesinato de Sísara por sus propias manos fue muy inusual, especialmente para una mujer. No solo demostró su valor, sino también su deseo de mostrar a los israelitas de qué lado estaba. Podría haber dejado que Barac se encargara invitándolo a la tienda para acabar fácilmente con el agotado Sísara. Ella tomó las riendas de la situación, no porque fuera una persona violenta, sino porque era una persona que había hecho del enemigo de Dios su propio enemigo. En mi opinión, esto fue lo que la hizo una mujer especial, y ella merecplenamente el elogio de Débora: “Bendita entre las mujeres es Jael, mujer de Heber ceneo; bendita sea entre las mujeres de la tienda” (5:24).

Día 5

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Jueces 5:1–12

La Introducción: v. 1

En esencia, el Cántico de Débora es un relato poético de la derrota del ejército de Moab que brinda información sobre el evento histórico mencionado en el capítulo 4.

Convocatoria para alabar: vv. 2-3

(1) ¿Cuál es la razón dada para alabar a Dios?

(2) ¿Cuán especial es el hecho de que el llamado a la alabanza no se basa en la victoria?

(3) ¿ A quiénes invoca Deborah como oyentes? ¿Por qué?

El asombroso poder de Dios: vv. 4-5

(4) Débora parece estar citando Deuteronomio 33:2 para describir el asombroso poder de Dios sobre la naturaleza. No leímos nada sobre el temblor, ni de la tierra ni del cielo, en el relato de la derrota del ejército de Moab en el capítulo 4. ¿Qué buscaba describir Débora en su poema?

Un recuerdo de la difícil situación de Israel: vv. 6-8

(5) Según los vv. 7-8, ¿en qué condición se encontraba Israel antes de que Dios levantara a Débora para ser su libertadora. ¿Qué tipo de vida habían llevado esos veinte años? (4:3)

(6) Según el poema, ¿cuál había sido la causa de su difícil situación?

(7) En especial, ¿qué cuadro representa el v. 8b?

El punto de inflexión: vv. 9-12

(8) ¿Cómo Débora se refiere a sí misma en el v. 7?

(9) ¿De qué manera el v. 9 revela el corazón de Débora?

(10) ¿Quiénes son las personas a las que Débora desafía en el v. 10?

(11) ¿En qué sentido(s) usted podría ser como estas personas?

(12) Aunque no estamos seguros de quiénes eran los cantantes, ¿sobre qué cantaban?

(13) ¿Cómo respondieron las personas al desafío? ¿Por qué?

(14) ¿Cuán importante fue su respuesta?

(15) ¿Quién hace esta llamada de atención en el v. 12, Débora o las personas? ¿Qué diferencia hace?

(16) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
¿A alguien le importa?

Por haberse puesto al frente los caudillos en Israel, Por haberse ofrecido voluntariamente el pueblo, Load a Jehová.” (RVR1960) (Jueces 5:2)

Cuando leemos los salmos de David, vemos que no es raro que David o el salmista convoque al pueblo a alabar o a adorar. Sin embargo, la razón dada para esta llamada a alabar a Dios por parte de Débora es única: lo que la impulsa a convocar al pueblo a alabar a Dios no es la victoria en si, sino el hecho mismo de que el pueblo, y especialmente los príncipes de Israel, se ofrece de buena gana para luchar por Jehová, y estos últimos toman la iniciativa al hacerlo.

Si leyéramos solamente el evento histórico tal como se describe en el capítulo 4, automáticamente supondríamos que esta victoria tan grande contra el ejército de Moab, que contaba con 900 carros de hierro, se logró porque todo Israel se levantó contra su enemigo como uno solo hombre. Pero según la Canción de Débora no fue así.

Desde el principio, como se nos dice en el capítulo 4, incluso el principal campeón, Barac, vaciló. Y a medida que leemos el resto de la canción de Débora en el capítulo 5, llegamos a comprender que los líderes, las élites y las personas comunes evitaron participar en esta batalla que había sido claramente convocada por Jehová (5:10). Aunque algunas de las tribus vinieron, son descritos como "el resto" (5:13). Peor aún, algunas de las tribus, como Dan, Aser y Gilead (probablemente una referencia a la mitad de la tribu de Manasés  que vivía al oeste del río Jordán), no participaron en absoluto (5:17).

Pero para Débora, el hecho de que otros se ofrecieran voluntariamente y algunos de los príncipes de Israel tomaran la iniciativa fue un motivo de alabanza y acción de gracias. En última instancia, la batalla pertenece a Jehová, y Jehová es quien sale victorioso. No se trata del número de personas que escuchan el llamado del Señor; se trata de si el Señor extiende Su llamado. En realidad, para aquellos que eligen no responder y obedecer, la pérdida es suya, no del Señor.

Así que anímese. Aunque usted no esté rodeado por una multitud de cristianos de ideas afines que son celosos por el Señor, con Dios de nuestro lado, ya somos la mayoría.

Día 6

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Jueces 5:13–23

Esta parte de la canción nos sorprende al revelar que no todas las tribus de Israel eran de un solo corazón:

El examen de conciencia: vv. 13-18

(1) Según el v. 13, ¿quiénes fueron los que decidieron responder al llamado de Débora?

(2) Deborah menciona los nombres de muchas de las tribus que participaron en la batalla. Intente hacer una lista de todas las tribus que respondieron.

(3) ¿Cuál de ellas parece haber respondido de manera voluntaria y sin vacilar?

(4) ¿Qué pasó con la tribu Rubén? ¿Por qué parecen haber vacilado?

(5) ¿Cómo describe Débora las tribus de Galaad, Dan y Aser? ¿Cuál fue su problema?

(6) ¿Cómo los avergüenza Débora en el v. 18?

(7) Aunque la canción parece señalar que Galaad, Dan y Aser no participaron, Judá y Simeón ni siquiera son mencionados en la canción. ¿Qué ha aprendido usted sobre esta gran victoria?

La derrota de los enemigos: vv. 19-23

(8) ¿Cómo describe el v. 19 la futilidad de los reyes cananeos?

(9) ¿Qué había animado el alma de Débora? En la opinión de Débora, ¿quién había sido responsable por la derrota de los enemigos?

(10) ¿Cómo describe ella el poder de la fuerza cananea que tenía muchos carros y caballos?

(11) Aunque no se sabe con certeza quiénes eran los Meroz (probablemente aliado con el cual Israel contaba), ¿por qué fueron maldecidos? Puesto que el “ángel de Jehová” pronunció esta maldición, ¿qué papel pudo haber desempeñado en estos eventos?

(12) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Nota:

Maquir (v. 14) probablemente es una representación poética de Manasés en general, puesto que Maquir fue el único hijo de Manasés, del cual descendieron todos los manasitas. Galaad se refiere a las tribus de Gad y la mitad de Manasés (K&D, 230-1).

Reflexión meditativa
Perder el sentido de misión

"Zabulón era pueblo que despreció su vida hasta la muerte. Y también Neftalí, en las alturas del campo." (LBLA) (Jueces 5:18)

Uno se pregunta por qué no todo Israel respondió al llamado de Débora y Barac de luchar contra sus enemigos; después de todo, había sido "oprimido duramente" durante veinte años.

La razón podría ser precisamente porque durante veinte años habían vivido en opresión y en rebelión contra el Señor ya estaban acostumbrados a ello. Pero la Canción de Débora nos brinda más información sobre las razones por las que no todos respondieron a su llamado.

Comodidad y complacencia:

A pesar de la cruel opresión de los moabitas, muchos todavía podían vivir con relativa comodidadLos que cabalgáis en asnas blancas, los que os sentáis en ricos tapices” (5:10): esta descripción es una señal de lujo y comodidad. Aunque corrían el riesgo de perder su nación, no les importaba en absoluto, siempre y cuando podían seguir disfrutando de sus privilegios.

Sin embargo, esa sensación de complacencia era contagiosa y podía afectar incluso a los que no vivían tan bien, como aquellos que “viajáis por el camino” (5:10b), es decir, aquellos que, a pesar de que no disfrutaban del mismo lujo, de todos modos habían sido infectados por el mismo espíritu de complacencia. Es evidente que al rebelarse contra el Señor y servir a otros dioses habían perdido su sentido de misión como pueblo de Dios.

Lo mismo de siempre:

Para aquellos que residen a lo largo de la costa, además de la comodidad y la facilidad relacionadas con el estilo de vida de la “costa oeste”, lo que los alejaron de la difícil situación de la opresión fueron las oportunidades de comercio que les ofrecían sus puertos: “Galaad se quedó al otro lado del Jordán. ¿Y por qué se quedó Dan en las naves? Aser se sentó a la orilla del mar, y se quedó junto a sus puertos”.

Esto describe acertadamente el estilo de vida costera en Norteamérica. Desde Vancouver hasta Los Ángeles, la vida en la costa oeste produce una sensación de comodidad y ocio que ha infestado tanto a los hijos de Dios que el cristianismo se ha vuelto tan cómodo que se ha perdido el sentido de misión. Pudiera parecer que muchos aún conservan un sentido de misión, pero el lujo los ha llevado a optar por sustituir la acción por una contribución financiera para la misión.

La costa este no es mejor. Desde Toronto hasta Nueva York, lo que les ha quitado el sentido de misión exigido por la Gran Comisión es el atractivo de la fama, la fortuna y el poder.

Realmente no deberíamos reírnos de los israelitas. Nosotros no somos mejores.

Lo mínimo que debemos hacer es lo que hicieron los rubenitas: "hubo grandes resoluciones de corazón" (5:15-16).

Día 7

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
Jueces 5:24–31

La bendita Jael vv. 24-27

(1) ¿Recuerda usted alguna otra mujer que las Escrituras hayan llamado de bendita?

(2) ¿Cuán especial fue Jael en la liberación de Israel con respecto a lo siguiente?

a. su nacionalidad (4:11, 17)

b. su encuentro inusual con Sísara

  1. un guerrero conocido
  2. uno que estaba siendo perseguido
  3. uno que por casualidad llegó a su tienda
  4. las alternativas (y excusas) que ella tenía

c. ¿Cómo mató a Sísara ?

(3) ¿Cómo la compararía usted con Rahab de Jericó (Jos. 2)?

La maldita madre de Sísara vv. 28-31

(4) En sus palabras poéticas, ¿Débora describe a la madre de Sísara como una mujer que lamenta o una que está llena de confianza?

(5) ¿Qué notícias esperaba escuchar sobre el resultado de la batalla?

(6) Al leer estas palabras que Débora pone en boca de la madre de Sísara, no podemos dejar de sentir una un poco de tristeza; después de todo, qué madre no lamentaría la pérdida de un hijo. Sin embargo, en el v. 31 Débora cita la razón fundamental del resultado de la batalla. ¿Cuál es?

(7) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
La decisión es nuestra

Miraba por la ventana y se lamentaba la madre de Sísara, por las celosías…” (LBLA) (Jue. 5:28)

A primera vista, parece que Deborah fue bastante fría e inhumana al usar a la madre de Sísara para burlarse de su derrota. ¿A qué madre no le importaría la pérdida de un hijo?

Sin embargo, al hacerlo Débora logra describir la confianza que tenían los moabitas con respecto a su dominio sobre los israelitas y el sentido de seguridad que les daban su fuerza, sus carros y sus dioses: “¿Por qué se tarda en venir su carro? ¿Por qué se retrasa el trotar de sus carros? (5:28).

Al mismo tiempo, destaca la crueldad y la insensibilidad de los cananeos, puesto que se puede resumir su estilo de vida con las siguientes palabras del Cántico de Débora: “¿Acaso no han hallado el botín y se lo están repartiendo? ¿Una doncella, dos doncellas para cada guerrero; para Sísara un botín de tela de colores, un botín de tela de colores bordada, tela de colores de doble bordadura en el cuello del victorioso?" (5:30).

Así, en lugar del llanto de las madres en Israel que habían estado de luto por la pérdida de sus hijos que había ocurrido a lo largo de los 20 años anteriores, ahora se había invertido la situación.

Pero Débora explica la razón última de este resultado: “Así perezcan todos tus enemigos, oh Jehová; Mas los que te aman, sean como el sol cuando sale en su fuerza" (5:31).

¡Esto sirve como advertencia, no solo para los cananeos, sino también para Israel y para todos los pueblos de la tierra!