Esta semana terminaremos nuestro estudio del libro de 1 Samuel y comenzaremos a estudiar el Libro de 2 Samuel en el Antiguo Testamento.
(1) La última vez consideramos si David aceptaría a la oferta de Saúl de "volver" (26:21). Es obvio que David no la aceptó:
a. ¿Qué razón dio en el v. 1?
b. ¿A dónde decidió ir?
c. ¿Su decisión no iba en contra del consejo del profeta en 22:5?
(2) Ahora, David decidió por segunda vez ir a vivir con Aquis, rey de Gat:
a. ¿Cuál pudo haber sido la diferencia entre esta vez y la primera vez en 21:10-15?
b. ¿Saúl continuó persiguiéndolo? ¿Por qué o por qué no? (27:4)
(3) ¿Por qué David pidió permiso para no vivir dentro de la ciudad real con el rey?
(4) El rey le concedió Siclag, una ciudad de Judea que había ocupado y probablemente había dejado despoblada después de saquearla:
a. ¿Qué decidió David hacer en esta ciudad bastante alejada de la ciudad real que estaba más cerca de la región meridional de Judá? (27:8)
b. ¿Por qué David mentía al rey de Gat sobre sus incursiones contra los gesureos, gezritas y amalecitas (pueblos que atacaban constantemente las ciudades de Judá)?
c. Al hacer esto, ¿de qué logró convencer al rey de Gat?
(5) Al mismo tiempo, ¿qué pensaba el pueblo de Judá sobre David, a pesar de que residía dentro del territorio de los filisteos?
(6) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?
“Entonces David se dijo: Ahora bien, voy a perecer algún día por la mano de Saúl'.” (LBLA) (1 Sam. 27:1)
El apóstol Pablo ora por la iglesia de Filipos para que su “amor abunde aún más y más en conocimiento verdadero y en todo discernimiento” para que puedan discernir lo que es mejor (Fil. 1:9).
En otras palabras, Pablo no estima el amor "ciego", sino el amor que aumenta cada vez más en conocimiento y todo discernimiento. Esto lo vemos claramente en la vida de David, especialmente en su trato con Saúl.
Debido a su temor a Jehová que demostraba al honrar al ungido de Dios, además de su amor por Saúl — el amor del tipo ágape que uno extiende a su enemigo — David le perdonó la vida a Saúl al menos dos veces. Sin embargo, David no ignoraba qué clase de persona era Saúl; sabía que su orgullo continuaría impulsándolo a buscar matarlo para no perder su propio reinado. Por lo tanto, David no “volvió” a Saúl como se le pidió en 26:21. De hecho, decidió huir a un lugar donde Saúl no seguiría persiguiéndolo. Yo creo que su intención no fue solo intentar salvar su propia vida, sino evitar que Saúl cometiera un pecado demasiado grave ante Jehová.
Sin embargo, la decisión de esconderse entre los filisteos habría sido polémica:
- Primero, era algo que Dios, a través del profeta Gad, ya le había advertido claramente que no hiciera (22:5).
- Segundo, su aparente cambio de lealtad arrojaría dudas sobre su carácter a los ojos de su pueblo, especialmente el pueblo de Judá.
Hasta ahora hemos visto que David siempre consultaba a Jehová antes de tomar cualquier paso, y aunque la Biblia no dice que lo aquí, creo que habría consultado a Jehová también antes de ir al rey de Gat.
Además, podemos ver su sabiduría al pedir vivir lejos de la ciudad real para que el rey y sus hombres no lo vigilaran de cerca. Esto le dio la oportunidad de proteger el pueblo de Judá de los constantes ataques por parte de los gesureos, la gezritas y los amalecitas, enemigos de las regiones vecinas (27:8). Ésta fue parte de la razón por la que cada vez que "atacaba el territorio ... no dejaba con vida hombre ni mujer" (27:9), para que las noticias de su protección de su propio pueblo no llegaran a los oídos de los filisteos.
Por supuesto, su corazón siempre estuvo con su pueblo, y su deseo siempre fue agradar a Dios, pero ese amor siempre se fundamentó en el conocimiento y un discernimiento profundo. El suyo es un ejemplo del cual debemos aprender.
(1) ¿Qué dilema enfrentaba David cuando los filisteos reunieron sus fuerzas para luchar contra Israel? ¿Qué piensa usted que habrá hecho David al enterarse de sus planes?
(2) Aunque Saúl no obedeció el mandamiento de Jehová de exterminar a los amalecitas (28:18), ¿qué nos dice sobre él su expulsión de los médiums y espiritistas de la tierra? (ver Levítico 19:31; 20:27 y Deuteronomio 18:10-13)
(3) ¿Por qué Jehová no respondió la pregunta de Saúl?
(4) ¿Eso significa que fue justificado que consultara a un médium? ¿Cuál fue su objetivo al hacerlo? (28:15)
(5) ¿Saúl tenía otra opción, ya que tenía miedo y Jehová no estaba con él?
(6) La Biblia dice: “Cuando la mujer vio a Samuel, clamó a gran voz;” (28:12). ¿Por qué se sorprendió tanto?
a. ¿Qué esperaba ver? (Es decir, ¿que es lo que normalmente sucedía?)
b. ¿Por qué esta vez fue tan diferente?
(7) Hay muchas interpretaciones acerca de lo que realmente sucedió con la aparición de Samuel. Es importante que no interpongamos ninguna noción preconcebida que podamos tener, y que simplemente leamos las Escrituras tal como fueron escritas y están presentadas:
a. Aunque Saúl entendió que el espíritu era de Samuel (tal como lo afirma el v. 14: “Y Saúl conoció que era Samuel”), ¿quién era la persona que le hablaba a Saúl, según el v. 15?
b. Si el espíritu no fuera el de Samuel, ¿qué habría dicho o escrito el autor bíblico?
(8) Saúl esperaba que Samuel le dijera qué hacer (28:15); sin embargo, ¿cuál fue la respuesta de Samuel?:
a. ¿Quién era Dios ahora para Saúl? (v. 16)
b. ¿A quién pertenecía ahora el reino de Israel? (v. 17)
c. ¿Cuál era el motivo de su caída? (v. 18)
d. ¿Cuál sería el resultado de la batalla? (v. 19)
(9) ¿Cómo respondió Saúl a las palabras de Samuel?
(10) En su opinión, ¿cómo Saúl debería haber respondido?
(11) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?
“Entonces Samuel dijo a Saúl: '¿Por qué me has perturbado haciéndome subir?'.” (LBLA) (1 Sam. 28:15)
La cuestión de si el espíritu invocado por la médium realmente era el de Samuel ha sido un tema muy debatido a lo largo de los últimos 2000 años de la cristiandad. Quisiera compartirles la siguiente opinión de dos eruditos conservadores de una generación pasada que eran respetados por su erudición y su ortodoxia:
“Sin embargo, los padres de la iglesia, los reformadores y teólogos cristianos anteriores, con muy pocas excepciones, mantenían que no hubo ninguna aparición real de Samuel, sino sólo una imaginaria ... un espectro diabólico, un fantasma o un espectro diabólico en la forma de Samuel ... en el que la verdad se mezcla con la falsedad. No fue hasta el siglo XVII que se expresó la opinión de que la aparición de Samuel fue una simple ilusión producida por la bruja ... No hay necesidad de refutar esta opinión en la actualidad. Incluso el P. Boettcher ... quien lo ve como un impostor, reconoce que el primero en registrar los eventos, 'creyó que Samuel apareció y profetizó, contrariamente a las expectativas de la bruja', y que el autor de los libros de Samuel estaba convencido de que el profeta había sido invocado y profetizó, de modo que fue demostrado, aún después de su muerte, que Samuel era el verdadero profeta de Jehová, aunque fuera mediante la intervención de artes impías (cf. Ezequiel 14:7, 9). Pero el punto de vista defendido por la iglesia primitiva no es coherente con la narrativa bíblica; por lo tanto, la opinión unánime de los comentaristas ortodoxos más modernos es que el profeta difunto realmente apareció y anunció la destrucción de Saulo, si bien no como consecuencia de la artes mágicas de la bruja, sino a través de un milagro realizado por la omnipotencia de Dios.
“Esta opinión es apoyado por el hecho de que el historiador profético, durante todo el relato, no habla de la aparición de un fantasma, sino del mismo Samuel ... (y) su anuncio contiene una profecía tan clara sobre la muerte de Saúl y sus hijos que es imposible imaginar que pueda haber salido de la boca de un impostor o haber sido una inspiración de Satanás. ... Por lo tanto, Shobel tiene toda la razón al decir — 'Lo que trajo a Samuel no fue la invocación del rey idólatra, ni la orden de la bruja, ninguno de los cuales tenía el poder para hacerlo, y ni siquiera para hacerle oír su voz mientras descansaba en la tumba; tampoco fue simplemente por un 'permiso' divino, que aún quedaría muy corto. No, más bien dejó su tumba por mandato especial de Dios ...'”
(Keil y Delitszch, 544-5)
(1) En aquella época no era raro que combatientes de otras etnias se unieran a los soldados de una nación y participaran en una batalla como mercenarios. ¿Cómo los siguientes factores llevaron a los gobernantes filisteos a oponerse a la participación de los hebreos?
a. la naturaleza de la batalla
b. la historia de David
c. su estado actual como fugitivo de Saúl
(2) ¿Crees que David realmente quería pelear con los filisteos contra Saúl cuando él mismo ni siquiera se atrevió a levantar la mano contra el rey ungido de Dios?
(3) El rechazo de los otros gobernantes filisteos debería haber sido una oportunidad de oro para que David se echara atrás. ¿Por qué David pareció insistir en unirse? (29:8)
(4) Si David había estado orando por el dilema que enfrentaba (yo creo que lo estaba haciendo), ¿cómo se habría sentido al ser enviado de regreso a Siclag ?
(5) Resultó que sus posesiones en Siclag, junto con sus esposas e hijos, habían sido tomadas por los amalecitas mientras David y sus hombres seguían al ejército de los filisteos (capítulo 30). A la luz de ello, ¿qué representó para David y sus hombres este rechazo por parte de los gobernantes de los filisteos?
(6) ¿Cómo este incidente nos ayuda a comprender lo que dice el apóstol Pablo en Romanos 8:28?
(7) ¿Puede usted recordar algún incidente en su vida que le haya mostrado la fidelidad de Dios?
(8) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?
"Reunieron los filisteos todos sus ejércitos en Afec, mientras los israelitas acamparon junto a la fuente que está en Jezreel." (LBLA) (1 Samuel 29:1)
Quisiera compartirles un poco de información histórica y geográfica acerca de los filisteos para darles una mejor idea de qué tipo de enemigo Israel tuvo que enfrentar desde la época de los jueces. (Israel fue gobernado por los jueces aproximadamente entre los años 1200 y 1025 a.C.; luego siguieron los reinados de Saúl y David .)
“Pero en el siglo XII a.C. … una sombra de muerte (una referencia a a los filisteos) se deslizaba por la cuenca del Mediterráneo, destruyendo todo a su paso. Finalmente, esta ola llegó a Anatolia, donde destruyó el Imperio hitita (que ni siquiera Ramsés II había logrado dominar) antes de volver su mirada hacia Siria y Canaán ... Los principales culpables de esta agitación fueron grupos de tribus merodeadores que los eruditos agrupan bajo la designación Pueblos del Mar ...
“Para el año 1175 a.C., los Pueblos del Mar habían conquistado la mayoría de las regiones costeras de las regiones que hoy son parte de Siria y el Líbano. Luego dirigieron su atención al último gran poder de la región: la tierra de Egipto, con sus innumerables templos y tesoros. Resultó que en ese momento Egipto estaba gobernado por Ramsés II, un comandante militar capaz, amable y muy exitoso ... (como resultado, los filisteos fueron rechazados de las costas egipcias, y) apuntaron sus barcos hacia el este, buscando un lugar seguro para aterrizar. Eligieron la costa sur de Canaán. Hasta ese momento, las ciudades costeras de la región — Ascalón, Ecrón , Asdod, Gat y Gaza — habían rechazado cualquier intento de infiltración israelita. En cambio, los filisteos las conquistaron con facilidad y rápidamente consolidaron su poder. Convirtieron las cinco ciudades en una confederación que pasó a ser conocida como Filistea (un término del cual los griegos más tarde derivaron la palabra 'Palestina' para referirse a todo Canaán) ...
“Era solo cuestión de tiempo antes de que estas personas obstinadas entraran en conflicto con los igualmente colonos israelitas, los cuales eran igualmente obstinados y decididos, un conflicto que forma el contexto de la última parte del libro de los Jueces (hasta la época de Saúl y David)."
(Jean-Pierre Isbout, National Geographic, The Biblical World, 161-164)
Por lo tanto, los filisteos, el enemigo que enfrentaba Israel, era muy diferente a los amalecitas y otros pueblos cananeos: era un pueblo bien organizado y bien entrenado, con una fuerza naval muy temida, incluso por los egipcios. Estos datos también resalta el hecho de que sus victorias sobre estos Pueblos del Mar solo pueden atribuirse a la ayuda de Jehová.
(1) ¿De quién fue la culpa de que David y sus hombres tuvieran que sufrir tal calamidad en manos de los amalecitas? (28:18; 15:20)?
(2) Aunque su ciudad había sido incendiada y sus posesiones, esposas e hijos llevados cautivos, ¿que límite había puesto Dios al daño que sufrieron? (30:2)
(3) ¿Por qué los hombres de David querían volverse contra él?
(4) ¿Qué significa la declaración "mas David se fortaleció en Jehová su Dios"? (30:6)
(5) Perseguir a los amalecitas para rescatar a sus esposas e hijos habría sido la única opción; ¿por qué, entonces, David tuvo que consultar a Jehová primero? (30:7-8)
(6) ¿Por qué doscientos de sus hombres estaban "demasiado fatigados", mientras que los otros cuatrocientos pudieron continuar la persecución? ¿Los cuatrocientos hombres tuvieron razón en menospreciar a los doscientos, cuyas esposas e hijos también habían sido llevados cautivos (30:22)? ¿Por qué o por qué no?
(7) ¿Cuál fue el resultado del esfuerzo de rescate? ¿Cuán especial fue este resultado? (30:17-20)
(8) Cuando regresaron, algunos de los 400 hombres pensaban que los 200 hombres no merecían recibir parte del botín, sino que solo se les devolviera a sus esposas e hijos:
a. ¿Acaso su propuesta no era justa? ¿Por qué o por qué no?
b. ¿Estos hombres merecían la etiqueta que les dio la Biblia: "hombres malvados e indignos"? ¿Por qué o por qué no?
(9) ¿Cómo llamó David a estos "hombres malvados" en el v. 23?
(10) ¿Qué razón dio David para compartir el botín de manera equitativa?
(11) ¿Está usted de acuerdo con su razonamiento? ¿Por qué o por qué no?
(12) ¿Por qué David compartió su botín incluso con básicamente todas las ciudades y pueblos por los que él y sus hombres habían vagado, o donde se habían quedado en el pasado?
(13) A la luz de esto, ¿cómo describiría usted el carácter de David?
(14) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?
“Porque conforme a la parte del que desciende a la batalla, así será la parte del que queda con el bagaje; ellos recibirán lo mismo." (LBLA) (1 Sam. 30:24)
Me impactó mucho la justicia que David demostró al distribuir el botín entre todos sus hombres. Sin embargo, al reflexionar sobre la razón de esta justicia, puedo ver que él fue de hecho un líder conforme al corazón de Dios.
Su justicia se fundamentaba claramente en estas palabras: “No hagáis eso, hermanos míos, de lo que nos ha dado Jehová, quien nos ha guardado, y ha entregado en nuestra mano a los merodeadores que vinieron contra nosotros” (RVR1960) (30:23). En otras palabras, David se dio cuenta verdadera y plenamente de que lo que les había dado la victoria sobre sus enemigos no fue su fuerza, sino la pura gracia de Dios. Puesto que se trataba de dones de la gracia de Dios, ¡cómo podía uno atreverse a reclamarlos como suyos! ¡David sinceramente atribuía todas sus victorias a Jehová y consideraba todo lo que tenía como un regalo de Dios!
Estoy seguro de que no guardó rencor contra los que tuvieron que quedarse atrás. Sabía que ellos también tenían esposas e hijos entre los que habían sido llevados cautivos (30:22). Si hubieran sido lo suficientemente fuertes, habrían ido con él, pero si hubieran sido obligados a seguir adelante sin ser lo suficientemente fuertes, ¡solo habrían resultado ser una carga para David! En efecto, todos tienen dones distintos. Algunos son fuertes y otros son débiles físicamente, pero cada uno tiene su papel asignado por Dios. No debemos asignar un valor a nadie en la familia de Dios con base en su apariencia externa y contribuciones visibles. ¡La directriz de David en este relato nos muestra que él era un líder totalmente centrado en Dios!
Sin embargo, me quedé igual de impactado con su generosidad. Él compartió su botín con muchas de las ciudades de Judá, las cuales probablemente habían sido atacadas por los amalecitas antes. Si bien algunos comentaristas lo consideran como una estrategia inteligente por parte de David para "comprar votos" para su futuro reinado, yo creo que el motivo de David fue más bien expresar su gratitud a muchos de estos pueblos que habían sido amables con él durante su huida de Saúl. ¡Ellos habían sido "sus amigos" en su momento de necesidad (30:26)! ¡Este líder conforme al corazón de Dios también tenía un corazón de gratitud!
(1) Además de ser una batalla contra un ejército de filisteos bien entrenados y bien equipados, esta también fue una batalla que carecía de la presencia de Jehová y Sus bendiciones (28:19). Por lo tanto, el resultado era predecible. ¿Usted alguna vez se encontró en una situación en la que sintió que estaba enfrentando la batalla de la vida por su cuenta, sin contar con las bendiciones de Dios? ¿Qué hizo usted, o qué podría haber hecho?
(2) La tragedia de esta batalla comenzó con la muerte de los tres hijos de Saúl, incluido Jonatán. ¿Cómo usted se sintió al leer sobre la muerte de Jonatán, un hombre que había permanecido fiel al verdadero ungido de Jehová hasta el final? ¿Fue correcto que perdiera su vida debido al pecado de su padre?
(3) Saúl finalmente tuvo que enfrentar su destino (que él ya conocía); sin embargo, luchó contra ese destino hasta el final. Separemos un tiempo para reflexionar sobre su vida:
a. La Bíblia lo presentó por primera vez como un hijo que se preocupaba por su padre (9:5); sin embargo, se convirtió en una persona que no tenía consideración por su pueblo, que los obligó a seguir luchando a pesar de su extrema fatiga (14:24). ¿Qué sucedió?
b. Vemos también que comenzó como una persona humilde que se sentía indigno de ser elegido por Jehová como rey (9:21); sin embargo, se convirtió en una persona que haría todo lo posible para mantener su poder, incluso perseguir y buscar matar a David, a quien sabía que había sido designado por Dios para reemplazarlo (24:20). ¿Qué sucedió?
c. Su orgullo creció: primero ofreció el sacrificio por su cuenta (13:9); luego perdonó a los amalecitas, violando la clara instrucción de Dios (15:9); más tarde, asesinó al sumo sacerdote de Dios y su familia (22:17-19). ¿Qué sucedió?
d. Si usted tuviera que escribir el epitafio de Saúl, ¿qué diría?
(4) Compare la muerte de Saúl (registrada en 31:6, 9) con la muerte de Elí (registrada en 4:17-18):
a. ¿En qué se parecían los dos hombres?
b. ¿Cuál de los dos llevó una vida más lamentable? ¿Por qué?
c. ¿Qué lecciones podría usted aprender de sus muertes?
(5) ¿Por qué, de todos los pueblos de Israel, el pueblo de Jabes de Galaad fue el que arriesgó las vidas de sus hombres para recuperar el cuerpo de Saúl, darle un entierro digno e incluso ayunar por él durante siete días? (ver el capítulo 11)
(6) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?
"Así murió Saúl aquel día, junto con sus tres hijos, su escudero y todos sus hombres." (LBLA) (1 Samuel 31:6)
Al llegar al final de 1 Samuel, también llegamos al final de la vida de Saúl, que terminó de la manera más trágica — él y sus tres hijos murieron el mismo día. Pero lo que hace que su muerte sea aún más lamentable es el hecho de que su vida terminó de una manera muy similar a la de Elí, el sumo sacerdote infiel que honró a sus hijos más que a Dios.
La muerte de los dos hijos
malvados de Elí fue predicha por el hombre de Dios (2:34), y murieron en la batalla contra los filisteos; Eli murió el mismo
día en una caída que le rompió el cuello. De manera similar, la muerte de
Saúl y sus hijos también fue profetizada por el hombre de Dios (28:19),
y los filisteos le cortaron la cabeza a Saúl. Sin embargo, de alguna manera
siento que la muerte de Saúl fue mucho más trágica que la de Elí:
a. Saúl vivió durante una época en que Israel estaba experimentando una transformación espiritual bajo Samuel. Él se había beneficiado de las enseñanzas de Samuel e incluso participó de este proceso de reforma. Un ejemplo es expulsión de todos los médiums y espiritistas (28:3).
b. Él experimentó personalmente la venida del Espíritu de Dios sobre él (10:10) y el poder de Dios al obtener la victoria sobre sus enemigos.
c. A diferencia de Elí, Saúl tenía al menos un hijo piadoso: Jonatán, que era lo suficientemente honesto y valiente como para señalar el camino errado de su padre (19:4-5), sin mencionar la compañía de Samuel, quien se preocupaba profundamente por él y oraba por él (16:1).
No quiero decir que Eli tuviera una espécie de excusa para sus insensateces, sino que él estaba bastante solo en su oscuro agujero espiritual. Por el contrario, Saúl estaba rodeado de hombres piadosos y recibió muchas oportunidades de arrepentimiento.
Tanto Elí como Saúl sabían que no habían obedecido a Jehová. Cuando le fue anunciado el castigo de Dios, Elí simplemente se resignó a aceptar lo que consideraba que era el resultado inevitable. En cambio, Saúl continuó luchando contra la voluntad de Dios hasta el final. ¡Ambos trajeron vergüenza al nombre de Jehová y a Su pueblo! ¡Ambos vivieron vidas de grandes remordimientos!