Guía devocional de la Biblia

Día 1

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
2 Samuel 7:1–17

Esta semana continuaremos nuestro estudio del libro de 2 Samuel en el Antiguo Testamento.

(1) ¿Qué le dio a David la idea de construir un templo para Jehová?

(2) ¿Por qué su deseo de construir un templo para Jehová era tan correcto y admirable?

(3) ¿Usted lo habría hecho si fuera David? ¿Por qué o por qué no?

(4) ¿Cuál fue la reacción inmediata de Natán a la petición o idea de David?

(5) ¿Cuál fue la suposición de Natán detrás de su respuesta?

(6) ¿Qué error cometió Natán?

(7) ¿Por qué Dios todavía hablaba a través de Natán y no directamente a David?

(8) Dios dijo: "¿Eres tú el que me va a edificar una casa para morar en ella?". En esencia, lo que hizo Dios con esta pergunta fue recordar a David que el simple hecho de que tuviera el deseo de construir una casa para Dios no quería decir que Dios lo había elegido para ello. ¿Cuál podría ser el mensaje para nosotros hoy?

(9) Se puede dividir la respuesta de Dios a David en cuatro partes:

a. Vv. 6-7: ¿Por qué no había sido oportuno construir algo tan permanente como una casa para Dios mientras el pueblo andaba errante por el desierto? ¿Qué nos dice esto sobre el deseo y el compromiso de Dios de estar donde sea que estemos?

b. Vv. 8-9: El Señor describió la vida anterior de David como una vida "de seguir las ovejas" ¿Acaso no debería haber dicho que el rebaño le siguía a David? ¿Qué quiso decir Jehová? ¿Esto describe la vida de usted también? ¿Qué cambio significativo había realizado Dios en la vida de David? ¿También lo ha hecho en la vida de usted?

c. Vv. 10-11: Aunque Dios había elevado y protegido a David, ¿cuál era Su mayor deseo?

d. Vv. 12-16: Este pasaje contiene lo que se llama "el Pacto Davídico". El pacto tiene dos partes:

  1. Una dimensión eterna: ¿A quién apunta el pacto? ¿En qué sentido ya está cumplido en nuestros días?
  2. Sin embargo, también hay una dimensión terrenal y humana: ¿A quién apunta? ¿Cómo se cumplió?

(10) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
¡Sirvi
r a Dios a Su manera!

"¿Eres tú el que me va a edificar una casa para morar en ella?" (LBLA) (2 Sam. 7:5)

No cabe duda de que el deseo de David de construir una casa para Jehová fue admirable. Su consternación por el hecho de que mientras él vivía en un gran palacio Jehová permanecía en una tienda improvisada es un reflejo del amor que tenía David por Jehová. Sin embargo, desde una perspectiva teológica, Dios no habita en ninguna estructura terrenal, como Salomón observó correctamente: “He aquí, los cielos y los cielos de los cielos no te pueden contener, cuánto menos esta casa que yo he edificado (1 Rey. 8:27).

No obstante, estoy seguro de que Jehová quedó muy contento con el deseo de David. Sin embargo, a pesar de lo admirable que era el deseo de David, el Señor le dijo: "¿Eres tú el que me va a edificar una casa para morar en ella?" (7:5) Como ya sabemos, al final resultó que el plan de Dios era que su hijo, Salomón, construyera Su templo.

Incluso Natán cometió el error de pensar que debido a que su deseo era tan bueno, David podía hacer lo que tuviera en mente, ya que Jehová estaba con él (7:3).

Ésta es una lección muy importante que debemos aprender mientras buscamos servir al Señor. No todo lo que deseamos es necesariamente lo que desea Dios, incluso cuando nuestras intenciones son nobles plantar una iglesia, participar en un viaje misionero a corto plazo o comenzar un nuevo ministerio. Necesitamos consultar a Jehová y obedecer Su voluntad y Su tiempo. De lo contrario, ¡lo que realmente hacemos es pedir al Señor que nos siga a nosotros!

Día 2

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
2 Samuel 7:18–29

La respuesta de David ante las palabras que Jehová le dijo a través del profeta Natán:

Vv. 18-21: "¿Quién soy yo?"

(1) ¿Por qué David quedó tan abrumado por la respuesta que Jehová le dio a través de Natán?

(2) ¿Qué había hecho que David se sintiera tan especial ante Jehová?

(3) ¿Usted se siente así? ¿Por qué o por qué no?

Vv. 22-24: Dios es real

(4) ¿Qué pudo haber causado que David experimentara la realidad de Dios más allá de lo que habían “oído con nuestros oídos”?

(5) ¿Cuán especial era el pueblo de Israel (según David ahora entendía)?

Vv. 25-26: Razones para que Dios cumpliera Su promesa

(6) ¿Cuáles fueron las tres razones que citó para que Dios cumpliera Su promesa?

(7) ¿Piensa usted que la última razón fue un poco egocéntrica? ¿Por qué o por qué no?

Vv. 27-29: la promesa de Dios de construir la casa de David en lugar de que David construyera la Suya

(8) ¿Qué oró David respecto a su propia casa?

(9) ¿Con qué fundamento pudo tener la osadía de hacer esa petición?

(10) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
Especial a los ojos de Dios

"¡Tal es tu plan para con los hombres, Señor y Dios!" (NVI) (2 Sam. 7:19)

David quedó completamente abrumado por la respuesta que Jehová le dio a través de Natán. Tenía la intención de construir una casa para Dios, pero a cambio Dios hizo un pacto con él para construir su casa para siempre.

Estoy seguro de que David, como su hijo, sabía que Dios realmente no habitaba en una casa construida por el hombre. Su verdadera intención era expresar su amor y agradecimiento a Dios por haberlo bendecido (a él y a su pueblo) al derrotar a todos sus enemigos, y por haber engrandecido su nombre entre las naciones. Sospecho que en la mente de David la construcción de una morada permanente para el Señor era una forma de invitarlo a morar entre ellos, a estar con ellos para siempre, a diferencia de lo que había sucedido en los tiempos de los Jueces, y también durante el reinado de Saúl.

A cambio, David finalmente recibió lo que pidió, aunque él no sería quien construiría el templo de Jehová. Este honor se le dio a su hijo, Salomón. Pero la promesa que recibió a cambio lo abrumó: ¡En lugar de que él construyera una casa para el Señor, el Señor le prometió construir para él una casa eterna! Esto lo llevó a exclamar: “¡Tal es tu plan para con los hombres, Señor y Dios! ¿Qué más te puede decir tu siervo David que tú no sepas, Señor mi Dios?" (7:19-20).

Nosotros obviamente no somos David; sin embargo, ¡así es como el Señor Soberano nos ha tratado también! Nosotros, que no éramos parte de la raza de Israel, y a quienes nunca nos había importado nada de Dios, mucho menos de Su casa, fuimos recibidos en esa casa eterna que Él le prometió a David, el Reino establecido por el Hijo de David, el Mesías, nuestro Señor Jesucristo. Esto fue hecho posible mediante el sacrificio de nuestro Señor Jesús en la cruz en el nuevo pacto de Su sangre (1 Corintios 11:25). De hecho, a los ojos de Dios somos tan especiales como lo es David.

Día 3

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
2 Samuel 8:1–18

Este capítulo parece ser un resumen las victorias de David sobre los enemigos circundantes de Israel, probablemente a lo largo de todo su reinado. Los capítulos 10 y 11 son relatos de sus batallas con los amonitas y sus aliados sirios.

(1) Si usted tiene acceso a un mapa bíblico del reinado de David, encuentre las regiones donde estaban localizados los filisteos y otros territorios como Moab, Zoba, Aram, Edom y otras naciones enemigas de David, como los amalecitas y amonitas. ¿Qué regiones conquistó David, convirtiendo a los habitantes en sus súbditos?

(2) ¿Cuál de los enemigos derrotados por David tuvo el mayor número de bajas?

(3) ¿Cuál de los enemigos derrotados por David estuvo mejor equipado?

(4) ¿Cuál fue la estrategia de David para asegurar su control continuo de algunos de los enemigos?

(5) ¿Qué busca demostrar el autor bíblico al informarnos sobre la extensión geográfica de la conquista de David, el saqueo que hizo y el tamaño de los ejércitos que capturó o derrotó?

(6) A pesar del gran éxito de David, ¿a qué atribuye el autor bíblico su éxito? (8:6, 14) ¿Por qué lo menciona dos veces en este breve capítulo?

(7) ¿Qué hizo David con muchos de los artículos de plata, oro y bronce que capturó o recibió como regalos de las naciones circundantes? ¿Qué podría haber hecho con estos objetos de valor?

(8) ¿Qué mostró su acción (de dedicar estos artículos a Jehová)?

(9) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
El modelo de teocracia

Y Jehová dio la victoria a David por dondequiera que fue. Y reinó David sobre todo Israel; y David administraba justicia y equidad a todo su pueblo.” (RVR1960) (2 Sam. 8:14-15)

Desde la liberación del pueblo de su esclavitud en Egipto, el deseo de Dios había sido que Israel fuera un reino de sacerdotes y una nación santa (Éxodo 19: 6). Después de muchos años de soportar el descarrío y la idolatría del pueblo, el Señor finalmente encontró un rey conforme a Su propio corazón que reinaría sobre Su pueblo con justicia y rectitud, de modo que pudiera cumplir Su promesa de darle a Su pueblo un hogar tranquilo, libre de la opresión de los impíos y donde podían hallar descanso de todos sus enemigos (2 Sam. 7:10-11).

A pesar de lo corto que fue este período de reinado justo y recto bajo David, debió haber sido una fuente de gran deleite para el Señor, porque aunque Israel estaba bajo un modelo monárquico, en esencia estaba finalmente bajo la teocracia.

Mientras “David reinó sobre todo Israel, y administraba justicia y derecho a todo su pueblo” (8:15), “Jehová dio la victoria a David por dondequiera que fue” (8:6, 14). El capítulo 8 de 2 Samuel, en el cual se detallan las grandes victorias de David (en que básicamente derrota y somete a los enemigos del sur, oeste, norte y este), es un claro eco del Salmo 33: “Bienaventurada la nación cuyo Dios es Jehová, El pueblo que él escogió como heredad para sí” (RVR1960) (Sal. 33:12). ¡Era cierto en la época de David y sigue siendo cierto hoy!

Día 4

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
2 Samuel 9:1–13

(1) Es posible que David ya hubiera oído hablar del hijo sobreviviente de Jonatán; por lo tanto, la verdadera pregunta era dónde estaba o si todavía estaba vivo. ¿Qué nos muestra su búsqueda del descendiente sobreviviente de Jonatán sobre la amistad de David con Jonatán?

(2) ¿Cómo mostró su bondad a Mefiboset?

(3) Aunque llamarse a sí mismo perro muerto era una especie demostración de humildad en el Antiguo Oriente, ¿ cuán cierto pudo haber sido cuando Mefiboset lo hizo para describir su situación?

(4) ¿Cómo puede usted ver la fidelidad de Dios revelada en una persona justa y fiel como Jonatán?

(5) No sabemos mucho sobre Maquir (que cuidó de Mefiboset), excepto que más tarde también cuidó a David cuando este huyó de su hijo (17:27):

a. En su opinión, ¿por qué se dio el trabajo de cuidar de Mephiboseth desde un principio?

b. ¿Qué riesgo pudo haber corrido?

(6) ¿Piensa usted que la discapacidad física de Mefiboset fue una maldición o una bendición?

(7) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
Bendiciones disfrazadas

Aún queda un hijo de Jonatán lisiado de ambos pies." (LBLA) (2 Sam. 9:3)

Mientras leía sobre la vida de Jonatan, no pude evitar desear que tuviera un final mejor. Una persona tan recta, que estuvo dispuesto a confrontar la maldad de su padre, arriesgar su vida por su buen amigo David y servirlo como rey (a pesar de que él era el heredero aparente legítimo del trono) terminó muerto en el campo de batalla pagando el precio del pecado de su padre.

Sin embargo, me consoló mucho esta lectura sobre cómo David extendió su bondad a Mefiboset porque me mostró que Dios en verdad es bueno con los justos. Aunque Mefiboset pudo haberse considerado desafortunado por haberse quedado lisiado cuando era niño mientras huía de los enemigos de Saúl, si eso no hubiera pasado Abner probablemente lo habría utilizado, haciéndolo rey sobre Israel en su intento de tomar el poder y librar la guerra contra David. Su destino no habría sido muy diferente al de Is-boset . Pero resultó que quedó inmune a cualquier estratagema política y vivió una vida de relativa paz. Ahora, como hijo de Jonatán, fue bendecido con la protección y provisión del rey.

A menudo nos quejamos al Señor debido a la desgracia en la que nos encontramos; sin embargo, el apóstol Pablo nos recuerda que "... a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados" (RVR1960) (Rom. 8:28). Este versículo describe la vida de Mefiboset, y también describe las vidas de todos a quienes Dios ama.

Día 5

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
2 Samuel 10:1–19

(1) Cuando Dios prometió darle descanso a David de todos sus enemigos (7:11), obviamente no quiso decir que no tendría enemigos, sino que prevalecería sobre ellos. Este capítulo nos muestra la realidad de esta promesa de Dios. A la luz de ello, ¿cómo puede usted aplicar en su vida la verdad sobre el “reposo” que podemos tener en el Señor?

(2) ¿Por qué David querría mostrar bondad al hijo de un antiguo enemigo (ver 1 Samuel 11)? ¿Cuán inusual era este tipo de gesto para un rey?

(3) ¿Cómo fue recibido su gesto amable? ¿Debería sorprendernos? ¿Por qué o por qué no?

(4) En su opinión, ¿cuáles fueron las intenciones de los nobles amonitas que dieron ese consejo a su rey?

(5) Si los amonitas sabían que no eran capaces de resistir un ataque proviniente del ejército de David, ¿por qué insultaron a sus mensajeros?

(6) ¿Cuántos mercenarios contrataron los amonitas? Aunque el texto no nos dice cuántos hombres tenía David (excepto en 6:1, cuando logró unir el reino por primera vez), parece que los dos lados tenían fuerzas bastante iguales:

a. En su opinión, ¿cuál sería, entonces, el factor determinante para el resultado de la batalla?

b. ¿Esto quiere decir que no era necesaria ninguna estrategia de batalla para el ejército de David?

c. ¿Qué estrategia empleó Joab?

d. ¿Se rindieron los arameos ante la victoria de Joab?

e. ¿Cuál fue el resultado final de la segunda batalla?

(7) ¿Qué representó esta batalla para las naciones vecinas?

(8) ¿Qué representó esta batalla para David?

(9) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
Descanse en el Señor

"Te daré reposo de todos tus enemigos." (LBLA) (2 Samuel 7:11)

Una de las características de los muchos salmos de David es su inclusión de alabanza y acción de gracias en medio de su vida de sufrimiento. De hecho, es imposible no sentir lástima por David, quien siempre estuvo atormentado por sus enemigos. ¡Uno se pregunta dónde quedó el descanso que Dios le había prometido!

Es cierto que después de su pecado de adulterio, muchos de sus sufrimientos (la violación y el asesinato entre sus hijos, y su eventual huida de Absalón para salvar su vida) fueron resultados de sus propias acciones.

Sin embargo, muchas de sus dificultades fueron relacionadas con su huida de Saúl y sus enfrentamientos con sus enemigos. Pero el descanso prometido por Dios no significa una vida de comodidad y tranquilidad, libre de problemas y guerras, sino la victoria y la liberación de todos los enemigos. Esta es la promesa que Dios cumplió en la vida de David, y la misma que ha dado a todos Sus hijos.

Jesús ha prometido descanso para nuestra alma (Mat. 11:29), y ese descanso no tiene nada que ver con nuestras circunstancias. A medida que aprendamos a confiar en Él, también encontraremos la liberación de toda clase de situaciones. En cuanto a la victoria sobre los enemigos, los nuestros no son externos como los de David, pero sí tenemos un enemigo interno nuestro antiguo yo. Cuando permitimos que el pecado nos gobierne, no podemos esperar disfrutar de un verdadero descanso en el Señor, y la culpa es de nosotros, no del Señor.

Día 6

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
2 Samuel 11:1–27

(1) David había participado activamente de la batalla anterior. ¿Por qué ahora permaneció en Jerusalén durante la temporada "cuando los reyes salen a la batalla" (11:1)?

(2) Esta historia ocurrió por la noche. ¿Por qué David se habrá levantado de su cama a esa hora? ¿Qué sugiere eso sobre su condición espiritual?

(3) ¿Qué debería haber hecho David después de ver que había una mujer bañándose?

(4) En lugar de ello ¿qué hizo a continuación? (ver Santiago 1:14-15)

(5) Después de enterarse de que Betsabé era una mujer casada y que su esposo estaba peleando en su guerra, ¿qué debería haber hecho David?

(6) ¿Qué hizo en su lugar?

(7) ¿Cómo pudo un hombre tan piadoso cometer un crimen tan horrible? ¿Cómo se puede explicar la acción de David?

(8) Betsabé estaba embarazada, lo que significa que David había tenido tiempo para reflexionar sobre el pecado que había cometido. ¿Qué opciones tenía? Según los vv. 6-13, ¿qué opción eligió?

(9) ¿Qué clase de persona era Urías? ¿Se merecía ese destino? ¿Usted se preguntó por qué Dios permitió que le sucediera algo tan horrible?

(10) ¿Qué le dijo David a Joab que hiciera?

(11) Compare lo que hizo David aquí con lo que había hecho Joab en 3:27:

a. ¿Cuál de los dos cometió el pecado más perverso?

b. A la luz de la maldición que David había invocado sobre Joab (3:29), ¿qué clase de maldición merecía David ahora?

c. ¿Solo una persona murió debido al malvado plan de David?

d. ¿En qué clase de rey se había convirtido?

e. ¿Todavía estaba apto para liderar a Israel?

(12) Incluso el pecado más horrible comienza con un primer paso. En el caso de David, ¿cuál fue ese primer paso?

(13) ¿Qué lección podemos aprender del fracaso de David?

(14) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
El corazón malvado de los hombres

Y pasado el luto, envió David y la [Betsabé] trajo a su casa; y fue ella su mujer, y le dio a luz un hijo. Mas esto que David había hecho, fue desagradable ante los ojos de Jehová.” (RVR1960) (2 Sam. 11:27)

Aunque ya he leído la historia del adulterio de David con Betsabé muchas veces, todavía me sorprende lo atroces que fueron sus pecados y lo malvado que fue David. Él no era un rey cualquiera, sino un rey conforme al corazón de Dios (1 Sam. 13:14).

Sin embargo, también me recuerda una vez más la verdad bíblica de que el corazón del hombre es más engañoso que todas las cosas (Jer. 17:9); por lo tanto, dadas ciertas circunstancias, todos somos capaces de cometer los pecados más espantosos. A pesar del asombro que nos provoca, hay lecciones importantes que todos podemos aprender del fracaso de David:

(1) El poder destructivo de la lujuria: Incluso antes de este incidente, David ya era propenso a la lujuria. No quedó satisfecho con sus seis esposas (2 Sam. 3:2-5), sinó que siguió aumentando su "colección" de esposas y concubinas. Nunca fue el tipo de marido que era fiel a una sola mujer.

(2) El poder engañoso del éxito: Mientras seguía obteniendo una victoria tras otra, fue seducido por una falsa sensación de seguridad; por lo tanto, incluso durante la temporada de las guerras (11:1), eligió permanecer en la comodidad de su palacio en Jerusalén, dejando que sus propios hombres arriesgaran sus vidas al luchar contra los muchos enemigos. Su comodidad y facilidad lo habían llevado a una vida de ocio, de tomar una siesta antes de acostarse, de merodear en el techo solo para ser atrapado por la seductora Betsabé. En otras palabras, David había perdido su sentido de misión.

(3) La corrupción del poder absoluto: Sin saberlo, David había adoptado la mentalidad de los reyes de las naciones vecinas. Con el poder absoluto vino la corrupción absoluta del poder. La ausencia de alguien a quien tenía que rendir cuentas alentó a David a tomar la esposa de otro sin ninguna vergüenza.

(4) La tentación de encubrir el pecado: Aunque su acto de adulterio pudo haber sido una debilidad espontánea, las medidas que tomó posteriormente para encubrir su pecado fueron calculadas y premeditadas. Oseas tiene razón, el adulterio quita el juicio (Oseas 4:11).

(5) La cauterización de la conciencia: Me sentí totalmente asombrado por la fidelidad mostrada por el esposo de Betsabé. Sus acciones no solo deberían haber avergonzado a David, sino también despertado su conciencia. Pero David, un rey cuyo corazón amaba al Señor y normalmente era honesto y sin engaño, había permitido que su deseo de encubrir su aventura perdidamente cauterizara su conciencia.

(6) La espiral descendente de la muerte: Se puede afirmar sin ninguna duda que el alma de David ya estaba casi muerta mientras planeaba asesinar a Urías a toda costa y al hacerlo causar la muerte de otros guerreros junto a Urías.

Incluso el pecado más horrible comienza con un primer paso. El deseo desfrenado de David por la lujuria había preparado el terreno para su propia destrucción. Este poderoso rey no fue derrotado en manos de sus poderosos enemigos, sino en su propia lujuria. ¡Qué lección para todos nosotros!

Día 7

Lea el pasaje por lo menos dos veces, reflexionando sobre ello detenidamente. Luego, considere las preguntas a continuación:

Reflexión sobre las Escrituras
2 Samuel 12:1–12

(1) A la luz del carácter tan horrible de los pecados cometidos por David (adulterio y asesinatos), ¿Natán no debería haberlo reprendido directamente? ¿Por qué decidió usar una parábola para mostrarle a David su pecado?

(2) Reflexione sobre la parábola que usó Natán:

a. Según David, ¿cuán perverso fue el pecado del hombre rico?

b. ¿Realmente se puede comparar el hombre a Urías? ¿Por qué o por qué no?

c. Sin embargo, ¿cómo reaccionó David al escuchar esta historia (probablemente porque pensó que era una historia real) y cuál fue su veredicto sobre el hombre rico?

(3) ¿Piensa usted que David supo inmediatamente de lo que estaba hablando Natán cuando dijo: "¡Tú eres aquel hombre!"? ¿Por qué o por qué no?

(4) Conteste a la luz de las palabras del Señor:

a. ¿Qué favor especial recibió David de Su parte?

b. ¿Cuán atroces habían sido sus pecados ante el Señor?

c. ¿Qué maldición ahora enfrentaba como resultado de ellos?

d. ¿El castigo de Dios fue acorde con los pecados de David? ¿Por qué o por qué no?

(5) Lea Mateo 1:6, una porción de la genealogía de nuestro Señor Jesucristo. ¿El autor bíblico menciona el nombre de esta esposa de David? Según el autor bíblico, ¿de quién es esposa Betsabé?

(6) ¿Cuál es el mensaje principal para usted hoy, y cómo puede aplicarlo a su vida?

Reflexión meditativa
¡Cuán precioso es el perdón de Dios!

"Ahora pues, la espada nunca se apartará de tu casa, porque me has despreciado y has tomado la mujer de Urías hitita para que sea tu mujer." (LBLA) (2 Sam. 12:10)

Este fue el juicio que Dios pronunció sobre David debido a sus pecados de adulterio y asesinato:

Por lo cual ahora no se apartará jamás de tu casa la espada, por cuanto me menospreciaste, y tomaste la mujer de Urías heteo para que fuese tu mujer. Así ha dicho Jehová: He aquí yo haré levantar el mal sobre ti de tu misma casa, y tomaré tus mujeres delante de tus ojos, y las daré a tu prójimo, el cual yacerá con tus mujeres a la vista del sol. Porque tú lo hiciste en secreto; mas yo haré esto delante de todo Israel y a pleno sol" (12:10-12).

A pesar de la gravedad y dureza de la sentencia, aún no era acorde con el crimen que había cometido. Ya fuera por adulterio o por asesinato, David merecía ser ejecutado, según lo establecido por la ley de Moisés (Lev. 20:10; Núm. 35:30).

Sin embargo, para una persona que en verdad ama al Señor, la muerte no es la pena más severa, sino la partida de Dios de la vida de uno; por eso David oró en su oración de arrepentimiento: “No me eches de tu presencia, y no quites de mí tu santo Espíritu” (Sal. 51:11).

También es posible que Dios en Su omnisciencia supiera que David se arrepentiría de manera genuina; y con su espíritu contrito y quebrantado, David obviamente recibió el perdón de Dios. Sin embargo, eso no quiere decir que no tuvo que enfrentar las "consecuencias naturales" de su pecado.

El perdón significa la restauración de nuestra comunión con Dios, pero el David perdonado todavía tuvo que enfrentar las calamidades en su familia, las cuales no eran tanto una maldición de Dios, sino las consecuencias naturales de sus pecados de adulterio y asesinato a sangre fría. Sin embargo, para David lo más valioso era que aunque tendría que enfrentar todas estas calamidades, no las enfrentaría solo; Dios estaría con él a cada paso. ¡Cuán precioso es el perdón de Dios!